Comentario sobre la doctrina eucarística de Teodoro de Mopsuestia
Haz un comentario a la doctrina eucarística de Teodoro de Mopsuestia que podrás encontrar en las páginas 310-324 del libro La Eucaristía en los Padres de la Iglesia del padre Manuel Zárate.
TEODORO DE MOPSUESTIA Reafirma que la Eucaristía no está reducida a un símbolo sino verdaderamente Cristo se hace presente por la acción del Espíritu Santo. Y al alimentarnos de ella se garantiza la resurrección y la perseverancia en esta vida. Invita a demás a comulgar a pesar de las faltas leves porque en la Eucaristía está la fuerza para vencerles. A demás cuando nos alimentamos de la Eucaristía nos unimos con Jesucristo. De Igual modo nos recuerda que Dios perdona los pecados a través del Sacerdote al cual hemos de acercarnos con confianza.
Me parece muy importante y muy actual ante el pensamiento de muchas personas que dicen que sólo comemos pan y vino en la Eucaristía, pero pone muy en claro cómo ya desde su tiempo ya se tenía claro como el pan y el vino común no son significado del Cuerpo y Sangre de Cristo; sino que son real y verdaderamente el Cuerpo y sangre del mismo Cristo y sólo pasa esto en la Eucaristía. Esa carne divina es la que nos da vida, ya que el Espíritu es el que nos vivifica; esto es sólo posible porque el Espíritu desciende en cada Eucaristía al pan y vino y nos da el Cuerpo y la Sangre de Cristo. Oscar Noé Meléndez Miranda
Aunque los sentidos nos presentan pan y vino la fe nos manifiesta el Cuerpo y la Sangre del Señor. Nuestro Dios, es Dios de vivos y de muertos. En la Eucaristía cada cristiano encuentra el auxilio espiritual para poder llevar una vida recta haciéndonos partícipes de la inmortalidad y miembros del único cuerpo de Cristo a través de la comunión. De tan grande banquete no somos dignos pero acercándonos con temor y viva caridad a recibirlo junto a un corazón contrito que reconoce las debilidades y limitaciones humanas. Saludos, Juan Carlos Eduardo Gómez Limón.
Doctrina Eucarística del Padre TEODORO DE MOPSUESTIA [Comentario: David Gutiérrez Murillo, 2° Teol.] En sus Homilías catequísticas nos recuerda el carácter de conmemoración que tiene la Eucaristía: en ella conmemoramos la muerte del Señor, que nos procura la resurrección. Desde su cuerpo triturado y su sangre derramada Cristo nos da la vida eterna. Al igual que San Cirilo de Jerusalén y San Cirilo de Alejandría, el Padre Teodoro nos habla de una conjunción [en vez de con-corpóreo, con-sanguíneo y fusión] de nosotros con nuestra Cabeza -Cristo- con quien formamos un solo cuerpo. No comulgamos por propios méritos, sino por la misericordia que Cristo tiene al ofrecernos su don. Como otros Padres, Teodoro también nos pone condiciones para acercarnos al divino misterio eucarístico, a saber: temor y gran caridad [temor, por la grandeza de su dignidad; amor, por la gracia]. Otra novedad en este Padre: Dios nos perdona mediante los Sacerdotes: por intermedio de ellos recibimos el tratamiento y la remisión de los pecados; por los que nos liberamos de la venganza futura.
DOCTRINA EUCARÍSTICA DE TEODORO DE MOPSUESTIA Como está luchando contra las herejías su de Nestorio su doctrina ve en esta línea. Dirá que el pan y el vino se convierten en cuerpo y sangre en virtud de la acción de gracias pronunciada sobre ellos por lo tanto quien se alimente de la Eucaristía supera la muerte, ya que la carne de Cristo, unida a la naturaleza divina, es la que da vida. Y esto no fue invención humana sino que así lo quiso Cristo. Es interesante ver como dice a los que tienen pecados leves que no han de alejarse de la eucaristía ya que ella es el remedio a sus males, es el alimento de la vida eterna, que cada vez que se nos da en la mesa se ofrece en sacrificio como lo hizo en la cruz…. Sin duda alguna no somos dignos de merecer tal gracia de parte del Señor, es puro don. Y aunque los sentidos nos engañan la maravilla del misterio está ahí presente…. Roberto García Durán.
TEODORO de MOPSUESTIA; nos enseña en la refutación a Nestorio:
1. Presencia real en pan y vino del cuerpo y sangre del Señor por la acción del Espiritu Santo. 2. Comulgar nos ayuda en la perseverancia y como fruto la resurrección. 3. Pide no alejarse de comulgar con pecados leves sino acercarse y en caso de gravedad acudir al sacerdote.
Teodoro rechaza explícitamente la interpretación puramente simbólica del sacramento, indicando que el pan y el vino se convierten en cuerpo y sangre en virtud de la acción de gracias pronunciadas sobre ellos. Realmente la hostia consagrada es el cuerpo de Cristo el el vino consagrado es la sangre de Cristo. Fortalezcamos nuestra fe para aceptar esta realidad de la presencia del Señor en las especies sacramentales. La carne de Cristo, unida a la naturaleza divina, es la que da vida. El misterio eucarístico se celebra con la participación del Espíritu Santo. Es el Espíritu Santo el que desciende sobre los dones del pan y del vino para transubstanciarlos en cuerpo y sangre de Cristo. Al contener este Espíritu, los dones sacramentales son capaces de dar vida. Adquiramos la vida de Dios por la comunión. No se debe alejar de la Eucaristía quien cae en faltas leves, provocadas por la debilidad humana, pues por la Eucaristía conseguirá el perdón de esos pecados y la fuerza para luchar contra ellos. Explica Teodoro por qué el Señor utilizó pan y vino: el alimento y la bebida nos dan la vida aquí en la tierra; Él hizo pan su cuerpo triturado y vino, su sangre derramada en la pasión, para que nos dieran vida eterna. Invita, también, a superar lo que aparece a los sentidos y a representar en el corazón lo que realmente es el pan sobre el que ha venido el Espíritu Santo: el cuerpo de Cristo. ÁLVARO VÁZQUEZ MONTES.
Teodoro con una analogía entre el pan que nos mantiene con vida y el pan que nos da inmortalidad alimento de los hijos de Dios por el bautismo, resalta el poder de la eucaristía como don de virtud para tener recta ordenación de nuestra vida, obteniendo el perdón que nos permite tener la esperanza de resurrección. Es otro Padre que hace alusión a que la carne de Cristo da vida por el Espíritu vivificador, y nos recuerda que el pecado nos separa de Dios y nos da muerte, por tanto nos recomienda alejarnos de las cosas con las que solemos caer por nuestra debilidad. También hace mucho énfasis en el sentido pasional de la eucaristía como inmolación de Cristo, pero afirma que en la comunión nos unimos a El, para la comunión recomienda el mantenernos dignos según nuestra capacidad humana, siendo conscientes de lo que hacemos y a quien recibimos. J. FELIPE DE JESUS BARAJAS RUEDAS
Teodoro de Mopsuestia resalta la importancia de creer con reverencia que el pan que recibimos al comulgar en la santa misa, es realmente el cuerpo del Señor, puesto que ante la palabra que nos dirige el sacerdote: "cuerpo de cristo" contestamos: Amén. Haciendo un acto de fe,en lo que no es un mero símbolo ,sino una realidad palpable que alcanzamos por la fe. Otro aspecto que me llama la atención, es la importancia que da a la frecuencia de la comunión, y que en los casos en que se requiera, se haga uso del sacramento de la reconciliación; sabiendo que no es un simple hombre el que nos absuelve de nuestras culpas, sino el mismo Dios,que se hace presente en el ministro ordenado.
TEODORO DE MOPSUESTIA Tal vez le hubiera hecho bien a Zwinglio y a Ecolampadio leer a Teodoro de Mopsuestia: él afirma que Cristo no dijo “Esto es el símbolo de mi Cuerpo”, sino “Esto es mi Cuerpo”, a la realidad cambiada en verdadero Cuerpo y Sangre. Nos recuerda además que no debemos de alejarnos de la Comunión por los pequeños accidentes de cada día (es decir, las faltas leves), sino que nos deben de inspirar un temor más grande de comulgar, rogando por la ayuda espiritual para ordenar nuestra vida de mejor manera... un buen consejo para nosotros los escrupulosos, jeje... nadie es digno, dirá Teodoro, sino que es fruto de la misericordia del Señor. Para eso, los pontífices, con gran compasión y caridad, perdonan nuestros pecados. FERNANDO VÁZQUEZ BAÑUELOS
Se nos dice que el que comulga, supera a la muerte, el cual nos da la vida, pues Dios el el Dios de vivos y no de muertos. También se nos invita a no dejar de comulgar el que cae en faltas leves, pues la Eucaristía es la que nos fortalece el cual cuando se celebra la Eucaristía es el mismo Cristo que sufrio en la pasión. Enrique Hernández Osorio.
TEODORO DE MOPSUESTIA Este escritor eclesiástico nos expone la fe fundamentada en Jesús histórico y en Cristo resucitado y nos invita a no separar a la persona de Cristo, sino mirándolo siempre unido a su historia en nuestra historia, es a todo él al que comemos en ese frágil trozo de pan. José Becerra Enciso
Este Santo Padre nos habla de la importancia k tiene la comunion para dar la vida despues de la muerte (resurrecion) y nos habla de la transubstanciacion ya k fortalecen nuestra fe para aceptar la presencia del Señor en las especies sacramentales, ademas k se habla de la voluntad de celebrar la sagrada eucaristia dia con dia, ademas k hace una refutacion a Nestorio y toda su herejia. y por ultimo nos habla de la confesion de boca k pot medio del sacerdote el mismo Dios nos perdona los pecados y asi podemos participar de la eucaristia...... Jose Alberto Rocha Rodriguez....
Teodoro de Mopsuestia señala que la Eucaristía no es símbolo de Cristo, sino que es realmente su Cuerpo y Sangre. Conviene trabajar la virtud y alejarse de lo que hace caer a los hombres en la debilidad de su naturaleza. Cuando se llevan la patena y el cáliz al altar es preciso ver que se lleva a Cristo hacia la Pasión. El obispo al ofrecerte el Cuerpo de Cristo te enseña que no mires lo que aparece, sino que representes en tu corazón lo que ha sido presentado y que por el Espíritu Santo es el cuerpo de Cristo. ATTE. SERGIO A. GARDUÑO OSORIO
La Eucaristía es el símbolo de todo cristiano, que logra unificarse con Cristo, si el hombre quiere participar de la vida eterna, necesita unirse a Cristo en el sacramento Eucarístico; es el pan de Vida, a través de este pan podemos llegar a recibir la inmortalidad de la vida. Los vasos sagrados toman la función de las manos más dignas para tomar el Cuerpo en la patena y la Sangre en el Cáliz. El Cuerpo de Cristo cura a todos aquellos pecadores y los prepara a recibir dignamente a través del ministro en la confesión. González Loza José Emmanuel.
Es de notar que Teodoro de Mopsusestia va a insitir con gran enfasis en las especies Eucarísticas del Pan y del Vino, que una vez pronunciada la formula de consagración, que nos conmemoran la última cena y el sacrificio ofrecido en la cruz, se convierten en el Cuerpo y la Sangre de Cristo en virtud de ellos mismos y alimentarnos de ellos nos hace superar la muerte, ya que Cristo mismo se ha inmolado para darnos la vida eterna, que manifiesta la vida que perdura en la eternidad, formando así un solo cuerpo que es la Iglesia. Jacobo Samdoval Betancpurt
TEODORO DE MOPSUESTIA en virtud de la acción de gracias que se hace sobre el pan y el vino se convierten en el curpo y sangra de Cristo las especies eucaristicas, quien come este manjar supera la muerte, la vida, da vida e inmortalidad, esta eucaristía fué voluntad del Señor que se celebrara. quien comete faltas leves no se alejó de la eucaristía,Dios perdona los pecados a traves del sacerdote. esta comunion une a Cristo como cabeza y a su iglesia que es cuerpo. nadie es digno del banquete pero Dios en su misericordia nos hace este don. COMENTARIO ERICK PRECIADO SANTANA
Así como da argumentos claros y con testimonio de las Escrituras, así da argumentos claros acerca de la Eucaristía. Consciente de lo que en cada Eucaristía se vive, nos deja en claro la plena actuación de Jesús, su presencia, pues nos invita a superar lo que aparece a los sentidos y a representar en el corazón lo que realmente es el pan. Juan José Sánchez D.
El que se alimenta de la eucaristía supera la muerte. Por la comunión con el cuerpo y sangre del Señor aseguramos nuestra resurrección para la vida. Sembramos constantemente en nuestro cuerpo este germen de vida eterna.
el alimento eucaristico es un alimento que sirve para superar la muerte, pues se recibe a Dios vivo por ello recomienda que se tenga acercamiento y trato frecuente con la Eucaristia ya que con ella se pueden superar los pecados y recibir fortaleza para hacerles frente y recibir asi la vida inmortal.
toma a la Eucaristia como una verdadera conmemoracion tal como nos lo dijo y dejó Jesucristo. Hemos de estar en comunión con Jesús; y de acercarnos a los sacerdotes para confesarnos y recibirlo con fe; más que con los sentidos.
Muchos protestantes creen que la eucaristía es algo simbólico, y ya era un error que se daba en tiempos de San Teodoro pues pone en evidencia que la transubstanciación de las especies es real y no simbólica, por la eficacia de la Epícleis y las mismas palabras de Cristo que la instituyó. Nos dice que éste alimento nos ayuda a superar la muerte pues nos ofrece la vida; por ellos quien peca ha de acercarse más frecuentemente a ella con santo temor, reconociendo la grandeza de lo que come y reconociendo su pecado, habiéndo recibido el perdón de los mismos, a fin de recibir la fuerza necesaria para ordenar su vida. e Nos dice que en la Eucaristía conmemoramos el Misterio pascual de Cristo, del cual nos hace partícipes, al formar un sólo cuerpo con él en la comunión, por ello hemos de recibirlo en dignidad.
Teodoro de Mopsuestia Señala claramente que Cristo nos dio su cuerpo y su sangre en el pan y el vino consagrados gracias a la acción de gracias sobre las ofrendas, por lo tanto no debemos dudar de su presencia en la Eucaristía consagrada. Es el cuerpo y la sangre de Cristo real y verdaderamente presente, no es un símbolo como argumentan heréticamente algunas sectas protestantes, es Cristo mismo el de la pasión quien se nos da en la hostia y el vino consagrados. Nadie es digno de recibir el cuerpo la sangre de Cristo, sin embargo debemos de esforzarnos por recibirlo lo más dignos posible, según la capacidad de nuestra naturaleza humana, preparada con obras de caridad y buenas costumbres. Mateo López Rodríguez
Debemos estar seguros que en la Hostia consagrada esta Cristo por la cual al comulgar aseguramos nuestra resurrección a la vida eterna, nos da pues vida inmortal. Néstor Ricardo Mariscal Álvarez. min.
Nos explica que Jesús no dijo las palabras, refiriéndose a la Eucaristía, que representaba su cuerpo y su sangre, sino que por la misma Eucaristía se cambian en su cuerpo y su sangre. Quien se alimente de este banquete, supera la muerte, pues siendo Dios de vivos, es la carne de Cristo unida a la naturaleza divina quien da vida. La Eucaristía es el sacrificio ofrecido como la conmemoración de la muerte del Señor y no deben de separarse de ella quienes cometen faltas leves, de este modo, este alimento nos da vida aquí en la tierra. Este mismo Cristo ofrecido en la Eucaristía, es el mismo que se encuentra en la Hostia y Vino consagrados. JUAN MANUEL ALVAREZ MAYORGA.
TEODORO DE MOPSUESTIA Doctrina Eucarística. Él nos dice acertadamente que el pan y el vino se convierten en sangre y cuerpo en virtud de la acción de gracias pronunciadas sobre ellos, por lo que el que se alimenta de la Eucaristía supera la muerte, Teodoro utiliza los termino conmemoración, sacramental, memorial aplicados al sacrificio Eucarístico dando una mayor claridad de lo que se celebra.
Teodoro de Mopsuestia Claramente se nos da a conocer que el cuerpo y la sangre de Cristo no son un símbolo sino que son verdadero cuerpo y sangre de Cristo. Quien lo come y lo bebe permanece unido a Él. Pero para que este alimento sea eficaz es necesario acercarse sin pecado. Cosa que la iglesia a través de los siglos ha comprendido muy bien. Sergio Carbajal Nuño
Teodoro de Mopsuestia no deja claro que por medio de la Eucaristía, podemos mantenernos con vida pues Ella es para quien se alimenta,un camino a la inmortalidad, pues quien como y bebe al Señor vivirá eternamente. att. Fernando Aguilera González
Éste santo, nacido en Antioquia, nos aclara que la presencia real de Jesucristo en el Pan y el Vino consagrados, no es simbólico -como algunos creen- y al recibir tan magnífico sacramento superamos la muerte, ya que nos da la vida porque es el Espíritu Santo quien convierte las especies eucarísticas en Cuerpo y Sangre del Señor. Quien comete faltas graves no debe alejarse del sacramento, sino de ayudarlo para combatir sus pecados. Al recibirlo también nos hacemos parte de su cuerpo, pero debemos reconocer que si lo recibimos es una gracia, un don, ya que ningún ser humano es digno de recibirlo. Hace también referencia a lo que muchos Padres nos han dicho ya, que aunque a nuestros sentidos aparezca simplemete con pan y vino, superemos esto y por la fe creamos que es Cuerpo y Sangre de Jesucristo.
Teodoro de Mopsuestia; en materia cristológica, defiende la doctrina de Nestorio: niega la unión física de las dos naturalezas de Cristo, niega el pecado original, pero se convierte y dice que el pan y el vino son el cuerpo y la sangre de Cristo, porque la carne de Cristo unida a la naturaleza divina da vida, deben comulgar frecuentemente, porque es la vida eterna.Evaristo Gabriel Flores Ochoa.
Teodoro de Mopsuestia: También habla del realismo del Cuerpo y la Sangre del Señor y no de un mero simbolismo. Aclara que no es el puro hecho de la carne lo que da vida (ya que otros pasajes de la Escritura dicen que es el espíritu lo que vivifica); pero en Cristo su carne nos da vida en cuanto que ésta está unida a la naturaleza divina. Ésta doctrina ayuda mucho a algunos cristianos que aún están empapados de una espiritualidad que infravalora la realidad corpórea considerándola como nociva para el alma. El hacer ver a nuestra gente que Cristo nos redimió también desde su Cuerpo y vino a salvarnos íntegros incluyendo nuestra realidad corpórea les ayudaría a un recto aprecio de nuestro cuerpo ya que incluso profesamos creer en la resurrección de la carne, misma que Teodoro atribuye por supuesto a la participación en el alimento de su Cuerpo. José Antonio Larios Suárez.
Es muy rica el contenido de la doctrina eucarística de Teodoro, algunos de los elementos que llaman la atención, es la observación que hace de que las personas con faltas leves no deben privarse de los misterios, sino que deben acercarse con mayor temor, dándose cuenta de la grandeza de ellos (misterios, eucaristía) porque de ahí podemos conseguir el perdón de los pecados. Oro elemento es que la Eucaristía es conmemorar la muerte de Nuestro Señor, que nos procura la resurrección y el gozo de la inmortalidad, por esta razón el que participa de este alimento será superior a la muerte, es decir, no morirá porque quien se alimenta de la Eucaristía es llamado a resucitar y porque Dios es un Dios de vivos y no de muertos.
Teodoro de Mopsuestia La Eucaristía supera la muerte porque sin duda quien se alimenta de este alimento logra la vida eterna otorgada por Dios mismo y no por méritos propios, ya que no se debe alejar del Señor quien comete pecados veniales, sino que debe fortalecerse para no volver a pecar y ser digno de recibir la Eucaristía. Jose Guadalupe Jimenez Nuñez
TEODORO DE MOPSUESTIA Es necesario e importante, no separar el elemento de la forma, en el caso de la Eucaristía, no sólo se da esta por el hecho de estar los elementos (pan y vino), sino que las palabras que se dicen sobre ellos tienen su valor dentro de este sacramento; el saber que todo aquél que coma del cuerpo de Cristo no conocerá la muerte debe ser para nosotros como cristianos, signo de alegría y de mayor entrega al servicio del Reino, la Eucaristía nos dará las fuerzas necesarias para superar las faltas graves y leves que por nuestra debilidad humana cometemos.
El que participa del alimento eucarístico supera la muerte. El mismo Señor fue el que mandó el encargo de celebrar. El que caiga en faltas leves acérquese al Señor no se aleje pues de él le puede venir el perdón de sus faltas. Con el pan y vino perduramos en esta vida, pero con su cuerpo y sangre tenemos vida perdurable e inmortal. No hay entre los hombres ninguno digno de recibir el cuerpo y sangre de Cristo, pero por su don todos podemos tomarlo. Por intermedio de los pontífices Dios nos perdona nuestras faltas cometidas.
Teodoro nos hace ver que la Eucaristía no es un símbolo, sino que realmente es Cuerpo y Sangre de Cristo por acción del Espíritu Santo, no es invención humana, sino mandato de Cristo. Insiste en que es alimento de inmortalidad que se nos da en el sacrificio de la cruz, por ello la misa tiene carácter sacrificial y memorial. Nos dice que no debemos dejar de comulgar por cualquier pecado leve, pues necesitamos ser alimentados por Quien nacimos en el Bautismo, y fuimos incorporados a Él, nunca seremos lo suficientemente dignos para recibirlo, son los méritos y misericordia de Jesús por lo que lo hacemos. Habla de la confesión, de la confianza que debemos tener y el secreto que debe guardar el sacerdote.FRANCISCO JAVIER CERVANTES RAMÍREZ
Fue monje, después abandona el monasterio para casarse y se hace abogado. Movido por su amigo Juan Crisóstomo vuelve a la vida monástica. Muere siendo obispo en el 428. Su principal obra se titula "sobre la encarnación". En cuanto a la Eucaristía indica que el pan y el vino se convierten en cuerpo y sangre gracias a las palabras pronunciadas por el ministro ordenado. Asegura que el que participe de éste alimento es superior a la muerte pues esta llamado a resucitar. Pide como todos los demás que quien cae en faltas leves provocadas por la debilidad humana no se aleje de la Eucaristía, pues lo ayudará a superar el pecado. Habla de la Eucaristía como memorial de la muerte de Cristo. Invita a los cristianos a que, en el Amén que se responde antes de recibir la Eucaristía reconozcan al mismo Dios, superando lo que aparece a los sentidos. Asegura el perdón de los pecados a través de los sacerdotes pues "nos hace libres de la venganza futura".
En este escrito este Obispo y Padre de la Iglesia nos dice que todos los hombres somos indignos de recibir el cuerpo del Señor, por que nuestra naturaleza tiende al mal, que por su naturaleza es corruptibles y mortal, por eso somos indignos de participar en ese Sagrado Banquete, pero es la gran Misericordia de Dios por lo que nos podemos acercar a este alimento celestial, el don de ese gran amor y esa gran misericordia es la que nos hace dignos de participar en la Eucaristía
Nos muestra la Eucaristía como alimento de vida eterna, pues el que se alimenta de ella supera la muerte. Distingue entre pecado mortal y venial y dice que no se ha de apartar de la Eucaristía el que comete pecados leves. Preciosamente nos habla de que la comunión es una conjunción con Él, nuestra cabeza, de los que formamos su cuerpo. ARMANDO GONZÁLEZ
El que recibe y se alimenta de la Eucaristía supera la muerte porque sin duda quien se alimenta de este alimento logra la vida eterna otorgada por Dios mismo; Así la carne de Cristo, unida a la naturaleza Divina, es la que da vida, la Eucaristía no es mera invención humana, sino “invención Divina” fue el mismo Señor quien encargara a su Iglesia celebrar en memoria suya, por eso la importancia del testimonio, recibirlo a Cristo, con respeto y amor reverencial, y no en pecado. Con Aprecio y estima: Rivas Mariscal Sebastián.
Teodoro de Mopsuestia En estos textos se hace de manera directa alusión a otro sacramento de la Iglesia: la confesión, al cual los fieles sean de acercar con confianza, ya que los ministros de la penitencia perdonan los pecados en virtud del encargo de Jesucristo, el perdón de los pecados Cristo no lo ha obtenido por su muerte y resurrección. El Misterio Pascual es conmemorado en cada Eucaristía, por mandato divino la eucaristía se seguirá celebrando para que se haga presente Cristo de manera real en las especias eucarísticas: alimento de vida eterna. Fabián Estrada Campos
Teodoro de Mopsuestia: Deja clara la realidad sustancial de la eucaristía como cuerpo de Cristo y no solamente símbolo, pues la carne no es útil al alma sino la naturaleza divina e incorpórea, aunque, evitando el dualismo, asegura que es por la carne que se comunica la vida del espíritu. Trata también un tema que considero necesario retomar: la inmortalidad, la cual es dad a los que comen el Cuerpo de Cristo. Creo que la razón de la pérdida del sentido de la existencia es la pérdida del sentido de la trascendencia.
La Eucaristía supera la muerte porque sin duda quien se alimenta de este alimento logra la vida eterna otorgada por Dios mismo y no por méritos propios, ya que no se debe alejar del Señor quien comete pecados veniales, sino que debe fortalecerse para no volver a pecar y ser digno de recibir la Eucaristía. Esta es nuestra esperanza cuando hacemos todo por cumplir la voluntad de Dios es lo que hace la diferencia del que vive solo para sí mismo y que piensa solo en el gozo efímero y aquel que trabaja todos los días por la esperanza puesta en Jesucristo que lo va a salvar.
Teodoro de Mopsuestia: Dos puntos que llamaron mi atención: 1.- la exhortación a la que nos invita a estar alejado de las cosas que nos apartan de Él, en su mayoría por la debilidad de la naturaleza y esforzándonos por vivir la virtud y la diligencia pueden disminuir nuestras culpas para así no apartarnos de los misterios y 2.-cuando respondemos -Amen- cuando el ministro nos presenta el Cuerpo de Cristo, no veamos solo el pan sino al mismo Cristo presentándonos con temor y con caridad. Atte: Juan Carlos Zambrano Herrera.
Comentario a la doctrina eucarística. Teodoro habla de la eficacia de las especies eucarísticas en cuerpo y sangre de Cristo en virtud de la acción de gracias pronunciada sobre ellas. Y aunque reconoce tal dignidad para ignorancia de muchos afirma que no se debe alejar de ella quien comete faltas leves. Algo nuevo de reconocer es que dice que quien se alimenta de la Eucaristía supera la muerte, Cristo hizo de la bebida su sangre y del pan su cuerpo para que nos diera vida eterna. Teodoro habla del sacramento de la reconciliación afirmando que Dios perdona los pecados a través de los sacerdotes.
para teodoro la eucaristia es el alimento que nos ayuda a superar la muerte, por lo cual invita a que el hombre no se aleje de ella pues por medio de ella el hombre se une a Dios, y cuyando el hombre esta unido a Dios se garantiza la vida inmortal Oscar Ivan Rivas Perez
Comentario de Teodoro Habla de la Eucaristía como el manjar de la vida nuestra. En el aspecto espiritual, aprovechemos para recibir esta invitación de vivir el misterio eucarístico con una coherencia de vida, quitando nuestros pecados. Una humildad que verdaderamente nos ayude a recibir la Eucaristía. Para participar del misterio de la resurrección. Omar Gerard Leyva Cárdenas.
Doctrina eucarística Comentarios: Comentarios y homilías catequísticas Hoy más que nada se duda de la presencia de Jesús en la Eucaristía y no se cree que realmente esté presente en ese trocito de pan y en vino. Y Dios nos va a dar vida con este sacramento. Nuestra gente en ocasiones se abstiene de comulgar con Jesús porque piensa que está en pecado grave cuando en realidad son veniales y precisamente de allí se recoge la urgencia de catequizar para especificar la diferencia entre pecado grave y pecado venial. Somos dichosos pues el Señor nos permite comerlo sin merecimiento alguno. Higinio Juárez Rendón
Afirma en sus Homilías catequísticas que la comunión es una conjunción con Él, nuestra cabeza, de los que formamos su cuerpo. Cuando nos alimentamos todos de un mismo cuerpo, el de Él, todos llegamos a ser el único cuerpo de Cristo, pues recibimos la comunión y conjunción con Él, como nuestra cabeza. De este modo estrechamos lo que hemos recibido por el bautismo-
Nos habla de que el cuerpo y la sangre de Cristo no son símbolos sino que es un hecho real, ya que Cristo no dijo “Esto es el símbolo de mi cuerpo y esto de mi sangre, sino: Esto es mi cuerpo y mi sangre” y con esto debemos ir más allá de las apariencias de la naturaleza. Con este alimento, nos enseña, seremos superiores a la muerte, pues no hemos de morir, ya que Dios mismo se presenta como un Dios de vivos y no de muertos. Además, la divinidad de Cristo es la que nos da Vida a través de su cuerpo, puesto que el solo cuerpo no nos aportaría nada, y esto se logra gracias al Espíritu Santo “que vivifica”. Retoma lo que san Agustín ya nos había recomendado, que por faltas leves no nos alejemos de la Eucaristía y que “conviene trabajar lo posible por estar lejos de aquellas otras cosas en las que suelen caer los hombres… el deseo de la virtud y la diligencia cotidiana de la vida pueden disminuir enteramente tales pecados, y los que caen en ellos no deben privarse de los misterios… porque de ahí podemos conseguir el perdón de los pecados”. Eduardo Camacho Nieves
TEODORO DE MOPSUESTIA
ResponderEliminarReafirma que la Eucaristía no está reducida a un símbolo sino verdaderamente Cristo se hace presente por la acción del Espíritu Santo. Y al alimentarnos de ella se garantiza la resurrección y la perseverancia en esta vida. Invita a demás a comulgar a pesar de las faltas leves porque en la Eucaristía está la fuerza para vencerles. A demás cuando nos alimentamos de la Eucaristía nos unimos con Jesucristo. De Igual modo nos recuerda que Dios perdona los pecados a través del Sacerdote al cual hemos de acercarnos con confianza.
Me parece muy importante y muy actual ante el pensamiento de muchas personas que dicen que sólo comemos pan y vino en la Eucaristía, pero pone muy en claro cómo ya desde su tiempo ya se tenía claro como el pan y el vino común no son significado del Cuerpo y Sangre de Cristo; sino que son real y verdaderamente el Cuerpo y sangre del mismo Cristo y sólo pasa esto en la Eucaristía.
ResponderEliminarEsa carne divina es la que nos da vida, ya que el Espíritu es el que nos vivifica; esto es sólo posible porque el Espíritu desciende en cada Eucaristía al pan y vino y nos da el Cuerpo y la Sangre de Cristo.
Oscar Noé Meléndez Miranda
Aunque los sentidos nos presentan pan y vino la fe nos manifiesta el Cuerpo y la Sangre del Señor. Nuestro Dios, es Dios de vivos y de muertos. En la Eucaristía cada cristiano encuentra el auxilio espiritual para poder llevar una vida recta haciéndonos partícipes de la inmortalidad y miembros del único cuerpo de Cristo a través de la comunión. De tan grande banquete no somos dignos pero acercándonos con temor y viva caridad a recibirlo junto a un corazón contrito que reconoce las debilidades y limitaciones humanas. Saludos, Juan Carlos Eduardo Gómez Limón.
ResponderEliminarDoctrina Eucarística del Padre TEODORO DE MOPSUESTIA
ResponderEliminar[Comentario: David Gutiérrez Murillo, 2° Teol.]
En sus Homilías catequísticas nos recuerda el carácter de conmemoración que tiene la Eucaristía: en ella conmemoramos la muerte del Señor, que nos procura la resurrección. Desde su cuerpo triturado y su sangre derramada Cristo nos da la vida eterna.
Al igual que San Cirilo de Jerusalén y San Cirilo de Alejandría, el Padre Teodoro nos habla de una conjunción [en vez de con-corpóreo, con-sanguíneo y fusión] de nosotros con nuestra Cabeza -Cristo- con quien formamos un solo cuerpo. No comulgamos por propios méritos, sino por la misericordia que Cristo tiene al ofrecernos su don. Como otros Padres, Teodoro también nos pone condiciones para acercarnos al divino misterio eucarístico, a saber: temor y gran caridad [temor, por la grandeza de su dignidad; amor, por la gracia].
Otra novedad en este Padre: Dios nos perdona mediante los Sacerdotes: por intermedio de ellos recibimos el tratamiento y la remisión de los pecados; por los que nos liberamos de la venganza futura.
DOCTRINA EUCARÍSTICA DE TEODORO DE MOPSUESTIA
ResponderEliminarComo está luchando contra las herejías su de Nestorio su doctrina ve en esta línea. Dirá que el pan y el vino se convierten en cuerpo y sangre en virtud de la acción de gracias pronunciada sobre ellos por lo tanto quien se alimente de la Eucaristía supera la muerte, ya que la carne de Cristo, unida a la naturaleza divina, es la que da vida. Y esto no fue invención humana sino que así lo quiso Cristo.
Es interesante ver como dice a los que tienen pecados leves que no han de alejarse de la eucaristía ya que ella es el remedio a sus males, es el alimento de la vida eterna, que cada vez que se nos da en la mesa se ofrece en sacrificio como lo hizo en la cruz…. Sin duda alguna no somos dignos de merecer tal gracia de parte del Señor, es puro don. Y aunque los sentidos nos engañan la maravilla del misterio está ahí presente…. Roberto García Durán.
TEODORO de MOPSUESTIA; nos enseña en la refutación a Nestorio:
ResponderEliminar1. Presencia real en pan y vino del cuerpo y sangre del Señor por la acción del Espiritu Santo.
2. Comulgar nos ayuda en la perseverancia y como fruto la resurrección.
3. Pide no alejarse de comulgar con pecados leves sino acercarse y en caso de gravedad acudir al sacerdote.
Att. Francisco Javier Murillo Chávez
Teodoro rechaza explícitamente la interpretación puramente simbólica del sacramento, indicando que el pan y el vino se convierten en cuerpo y sangre en virtud de la acción de gracias pronunciadas sobre ellos. Realmente la hostia consagrada es el cuerpo de Cristo el el vino consagrado es la sangre de Cristo. Fortalezcamos nuestra fe para aceptar esta realidad de la presencia del Señor en las especies sacramentales. La carne de Cristo, unida a la naturaleza divina, es la que da vida. El misterio eucarístico se celebra con la participación del Espíritu Santo. Es el Espíritu Santo el que desciende sobre los dones del pan y del vino para transubstanciarlos en cuerpo y sangre de Cristo. Al contener este Espíritu, los dones sacramentales son capaces de dar vida. Adquiramos la vida de Dios por la comunión. No se debe alejar de la Eucaristía quien cae en faltas leves, provocadas por la debilidad humana, pues por la Eucaristía conseguirá el perdón de esos pecados y la fuerza para luchar contra ellos. Explica Teodoro por qué el Señor utilizó pan y vino: el alimento y la bebida nos dan la vida aquí en la tierra; Él hizo pan su cuerpo triturado y vino, su sangre derramada en la pasión, para que nos dieran vida eterna. Invita, también, a superar lo que aparece a los sentidos y a representar en el corazón lo que realmente es el pan sobre el que ha venido el Espíritu Santo: el cuerpo de Cristo. ÁLVARO VÁZQUEZ MONTES.
ResponderEliminarTeodoro con una analogía entre el pan que nos mantiene con vida y el pan que nos da inmortalidad alimento de los hijos de Dios por el bautismo, resalta el poder de la eucaristía como don de virtud para tener recta ordenación de nuestra vida, obteniendo el perdón que nos permite tener la esperanza de resurrección.
ResponderEliminarEs otro Padre que hace alusión a que la carne de Cristo da vida por el Espíritu vivificador, y nos recuerda que el pecado nos separa de Dios y nos da muerte, por tanto nos recomienda alejarnos de las cosas con las que solemos caer por nuestra debilidad. También hace mucho énfasis en el sentido pasional de la eucaristía como inmolación de Cristo, pero afirma que en la comunión nos unimos a El, para la comunión recomienda el mantenernos dignos según nuestra capacidad humana, siendo conscientes de lo que hacemos y a quien recibimos. J. FELIPE DE JESUS BARAJAS RUEDAS
Teodoro de Mopsuestia resalta la importancia de creer con reverencia que el pan que recibimos al comulgar en la santa misa, es realmente el cuerpo del Señor, puesto que ante la palabra que nos dirige el sacerdote: "cuerpo de cristo" contestamos: Amén. Haciendo un acto de fe,en lo que no es un mero símbolo ,sino una realidad palpable que alcanzamos por la fe. Otro aspecto que me llama la atención, es la importancia que da a la frecuencia de la comunión, y que en los casos en que se requiera, se haga uso del sacramento de la reconciliación; sabiendo que no es un simple hombre el que nos absuelve de nuestras culpas, sino el mismo Dios,que se hace presente en el ministro ordenado.
ResponderEliminarTEODORO DE MOPSUESTIA
ResponderEliminarTal vez le hubiera hecho bien a Zwinglio y a Ecolampadio leer a Teodoro de Mopsuestia: él afirma que Cristo no dijo “Esto es el símbolo de mi Cuerpo”, sino “Esto es mi Cuerpo”, a la realidad cambiada en verdadero Cuerpo y Sangre. Nos recuerda además que no debemos de alejarnos de la Comunión por los pequeños accidentes de cada día (es decir, las faltas leves), sino que nos deben de inspirar un temor más grande de comulgar, rogando por la ayuda espiritual para ordenar nuestra vida de mejor manera... un buen consejo para nosotros los escrupulosos, jeje... nadie es digno, dirá Teodoro, sino que es fruto de la misericordia del Señor. Para eso, los pontífices, con gran compasión y caridad, perdonan nuestros pecados.
FERNANDO VÁZQUEZ BAÑUELOS
Se nos dice que el que comulga, supera a la muerte, el cual nos da la vida, pues Dios el el Dios de vivos y no de muertos. También se nos invita a no dejar de comulgar el que cae en faltas leves, pues la Eucaristía es la que nos fortalece el cual cuando se celebra la Eucaristía es el mismo Cristo que sufrio en la pasión.
ResponderEliminarEnrique Hernández Osorio.
TEODORO DE MOPSUESTIA
ResponderEliminarEste escritor eclesiástico nos expone la fe fundamentada en Jesús histórico y en Cristo resucitado y nos invita a no separar a la persona de Cristo, sino mirándolo siempre unido a su historia en nuestra historia, es a todo él al que comemos en ese frágil trozo de pan.
José Becerra Enciso
Este Santo Padre nos habla de la importancia k tiene la comunion para dar la vida despues de la muerte (resurrecion) y nos habla de la transubstanciacion ya k fortalecen nuestra fe para aceptar la presencia del Señor en las especies sacramentales, ademas k se habla de la voluntad de celebrar la sagrada eucaristia dia con dia, ademas k hace una refutacion a Nestorio y toda su herejia. y por ultimo nos habla de la confesion de boca k pot medio del sacerdote el mismo Dios nos perdona los pecados y asi podemos participar de la eucaristia......
ResponderEliminarJose Alberto Rocha Rodriguez....
Teodoro de Mopsuestia señala que la Eucaristía no es símbolo de Cristo, sino que es realmente su Cuerpo y Sangre. Conviene trabajar la virtud y alejarse de lo que hace caer a los hombres en la debilidad de su naturaleza. Cuando se llevan la patena y el cáliz al altar es preciso ver que se lleva a Cristo hacia la Pasión. El obispo al ofrecerte el Cuerpo de Cristo te enseña que no mires lo que aparece, sino que representes en tu corazón lo que ha sido presentado y que por el Espíritu Santo es el cuerpo de Cristo.
ResponderEliminarATTE. SERGIO A. GARDUÑO OSORIO
COMENTARIO EUCARÍSTICO DE TEODORO DE MOPSUESTIA
ResponderEliminarLa Eucaristía es el símbolo de todo cristiano, que logra unificarse con Cristo, si el hombre quiere participar de la vida eterna, necesita unirse a Cristo en el sacramento Eucarístico; es el pan de Vida, a través de este pan podemos llegar a recibir la inmortalidad de la vida. Los vasos sagrados toman la función de las manos más dignas para tomar el Cuerpo en la patena y la Sangre en el Cáliz.
El Cuerpo de Cristo cura a todos aquellos pecadores y los prepara a recibir dignamente a través del ministro en la confesión.
González Loza José Emmanuel.
Es de notar que Teodoro de Mopsusestia va a insitir con gran enfasis en las especies Eucarísticas del Pan y del Vino, que una vez pronunciada la formula de consagración, que nos conmemoran la última cena y el sacrificio ofrecido en la cruz, se convierten en el Cuerpo y la Sangre de Cristo en virtud de ellos mismos y alimentarnos de ellos nos hace superar la muerte, ya que Cristo mismo se ha inmolado para darnos la vida eterna, que manifiesta la vida que perdura en la eternidad, formando así un solo cuerpo que es la Iglesia.
ResponderEliminarJacobo Samdoval Betancpurt
TEODORO DE MOPSUESTIA
ResponderEliminaren virtud de la acción de gracias que se hace sobre el pan y el vino se convierten en el curpo y sangra de Cristo las especies eucaristicas, quien come este manjar supera la muerte, la vida, da vida e inmortalidad, esta eucaristía fué voluntad del Señor que se celebrara.
quien comete faltas leves no se alejó de la eucaristía,Dios perdona los pecados a traves del sacerdote. esta comunion une a Cristo como cabeza y a su iglesia que es cuerpo. nadie es digno del banquete pero Dios en su misericordia nos hace este don.
COMENTARIO ERICK PRECIADO SANTANA
Así como da argumentos claros y con testimonio de las Escrituras, así da argumentos claros acerca de la Eucaristía. Consciente de lo que en cada Eucaristía se vive, nos deja en claro la plena actuación de Jesús, su presencia, pues nos invita a superar lo que aparece a los sentidos y a representar en el corazón lo que realmente es el pan. Juan José Sánchez D.
ResponderEliminarEl que se alimenta de la eucaristía supera la muerte. Por la comunión con el cuerpo y sangre del Señor aseguramos nuestra resurrección para la vida. Sembramos constantemente en nuestro cuerpo este germen de vida eterna.
ResponderEliminarel alimento eucaristico es un alimento que sirve para superar la muerte, pues se recibe a Dios vivo por ello recomienda que se tenga acercamiento y trato frecuente con la Eucaristia ya que con ella se pueden superar los pecados y recibir fortaleza para hacerles frente y recibir asi la vida inmortal.
ResponderEliminarEudaldo Torres Pérez. Saludos.
toma a la Eucaristia como una verdadera conmemoracion tal como nos lo dijo y dejó Jesucristo. Hemos de estar en comunión con Jesús; y de acercarnos a los sacerdotes para confesarnos y recibirlo con fe; más que con los sentidos.
ResponderEliminarJorge Gutiérrez Arellano.
Muchos protestantes creen que la eucaristía es algo simbólico, y ya era un error que se daba en tiempos de San Teodoro pues pone en evidencia que la transubstanciación de las especies es real y no simbólica, por la eficacia de la Epícleis y las mismas palabras de Cristo que la instituyó. Nos dice que éste alimento nos ayuda a superar la muerte pues nos ofrece la vida; por ellos quien peca ha de acercarse más frecuentemente a ella con santo temor, reconociendo la grandeza de lo que come y reconociendo su pecado, habiéndo recibido el perdón de los mismos, a fin de recibir la fuerza necesaria para ordenar su vida. e Nos dice que en la Eucaristía conmemoramos el Misterio pascual de Cristo, del cual nos hace partícipes, al formar un sólo cuerpo con él en la comunión, por ello hemos de recibirlo en dignidad.
ResponderEliminarTeodoro de Mopsuestia
ResponderEliminarSeñala claramente que Cristo nos dio su cuerpo y su sangre en el pan y el vino consagrados gracias a la acción de gracias sobre las ofrendas, por lo tanto no debemos dudar de su presencia en la Eucaristía consagrada. Es el cuerpo y la sangre de Cristo real y verdaderamente presente, no es un símbolo como argumentan heréticamente algunas sectas protestantes, es Cristo mismo el de la pasión quien se nos da en la hostia y el vino consagrados. Nadie es digno de recibir el cuerpo la sangre de Cristo, sin embargo debemos de esforzarnos por recibirlo lo más dignos posible, según la capacidad de nuestra naturaleza humana, preparada con obras de caridad y buenas costumbres. Mateo López Rodríguez
Debemos estar seguros que en la Hostia consagrada esta Cristo por la cual al comulgar aseguramos nuestra resurrección a la vida eterna, nos da pues vida inmortal.
ResponderEliminarNéstor Ricardo Mariscal Álvarez. min.
Nos explica que Jesús no dijo las palabras, refiriéndose a la Eucaristía, que representaba su cuerpo y su sangre, sino que por la misma Eucaristía se cambian en su cuerpo y su sangre. Quien se alimente de este banquete, supera la muerte, pues siendo Dios de vivos, es la carne de Cristo unida a la naturaleza divina quien da vida.
ResponderEliminarLa Eucaristía es el sacrificio ofrecido como la conmemoración de la muerte del Señor y no deben de separarse de ella quienes cometen faltas leves, de este modo, este alimento nos da vida aquí en la tierra. Este mismo Cristo ofrecido en la Eucaristía, es el mismo que se encuentra en la Hostia y Vino consagrados. JUAN MANUEL ALVAREZ MAYORGA.
TEODORO DE MOPSUESTIA
ResponderEliminarDoctrina Eucarística.
Él nos dice acertadamente que el pan y el vino se convierten en sangre y cuerpo en virtud de la acción de gracias pronunciadas sobre ellos, por lo que el que se alimenta de la Eucaristía supera la muerte, Teodoro utiliza los termino conmemoración, sacramental, memorial aplicados al sacrificio Eucarístico dando una mayor claridad de lo que se celebra.
ABRAHAM MERCADO CASTRO.
Teodoro de Mopsuestia
ResponderEliminarClaramente se nos da a conocer que el cuerpo y la sangre de Cristo no son un símbolo sino que son verdadero cuerpo y sangre de Cristo. Quien lo come y lo bebe permanece unido a Él. Pero para que este alimento sea eficaz es necesario acercarse sin pecado. Cosa que la iglesia a través de los siglos ha comprendido muy bien.
Sergio Carbajal Nuño
Teodoro de Mopsuestia no deja claro que por medio de la Eucaristía, podemos mantenernos con vida pues Ella es para quien se alimenta,un camino a la inmortalidad, pues quien como y bebe al Señor vivirá eternamente.
ResponderEliminaratt. Fernando Aguilera González
Éste santo, nacido en Antioquia, nos aclara que la presencia real de Jesucristo en el Pan y el Vino consagrados, no es simbólico -como algunos creen- y al recibir tan magnífico sacramento superamos la muerte, ya que nos da la vida porque es el Espíritu Santo quien convierte las especies eucarísticas en Cuerpo y Sangre del Señor. Quien comete faltas graves no debe alejarse del sacramento, sino de ayudarlo para combatir sus pecados. Al recibirlo también nos hacemos parte de su cuerpo, pero debemos reconocer que si lo recibimos es una gracia, un don, ya que ningún ser humano es digno de recibirlo. Hace también referencia a lo que muchos Padres nos han dicho ya, que aunque a nuestros sentidos aparezca simplemete con pan y vino, superemos esto y por la fe creamos que es Cuerpo y Sangre de Jesucristo.
ResponderEliminarTeodoro de Mopsuestia; en materia cristológica, defiende la doctrina de Nestorio: niega la unión física de las dos naturalezas de Cristo, niega el pecado original, pero se convierte y dice que el pan y el vino son el cuerpo y la sangre de Cristo, porque la carne de Cristo unida a la naturaleza divina da vida, deben comulgar frecuentemente, porque es la vida eterna.Evaristo Gabriel Flores Ochoa.
ResponderEliminarTeodoro de Mopsuestia: También habla del realismo del Cuerpo y la Sangre del Señor y no de un mero simbolismo. Aclara que no es el puro hecho de la carne lo que da vida (ya que otros pasajes de la Escritura dicen que es el espíritu lo que vivifica); pero en Cristo su carne nos da vida en cuanto que ésta está unida a la naturaleza divina. Ésta doctrina ayuda mucho a algunos cristianos que aún están empapados de una espiritualidad que infravalora la realidad corpórea considerándola como nociva para el alma. El hacer ver a nuestra gente que Cristo nos redimió también desde su Cuerpo y vino a salvarnos íntegros incluyendo nuestra realidad corpórea les ayudaría a un recto aprecio de nuestro cuerpo ya que incluso profesamos creer en la resurrección de la carne, misma que Teodoro atribuye por supuesto a la participación en el alimento de su Cuerpo.
ResponderEliminarJosé Antonio Larios Suárez.
Es muy rica el contenido de la doctrina eucarística de Teodoro, algunos de los elementos que llaman la atención, es la observación que hace de que las personas con faltas leves no deben privarse de los misterios, sino que deben acercarse con mayor temor, dándose cuenta de la grandeza de ellos (misterios, eucaristía) porque de ahí podemos conseguir el perdón de los pecados. Oro elemento es que la Eucaristía es conmemorar la muerte de Nuestro Señor, que nos procura la resurrección y el gozo de la inmortalidad, por esta razón el que participa de este alimento será superior a la muerte, es decir, no morirá porque quien se alimenta de la Eucaristía es llamado a resucitar y porque Dios es un Dios de vivos y no de muertos.
ResponderEliminarTeodoro de Mopsuestia
ResponderEliminarLa Eucaristía supera la muerte porque sin duda quien se alimenta de este alimento logra la vida eterna otorgada por Dios mismo y no por méritos propios, ya que no se debe alejar del Señor quien comete pecados veniales, sino que debe fortalecerse para no volver a pecar y ser digno de recibir la Eucaristía.
Jose Guadalupe Jimenez Nuñez
TEODORO DE MOPSUESTIA
ResponderEliminarEs necesario e importante, no separar el elemento de la forma, en el caso de la Eucaristía, no sólo se da esta por el hecho de estar los elementos (pan y vino), sino que las palabras que se dicen sobre ellos tienen su valor dentro de este sacramento; el saber que todo aquél que coma del cuerpo de Cristo no conocerá la muerte debe ser para nosotros como cristianos, signo de alegría y de mayor entrega al servicio del Reino, la Eucaristía nos dará las fuerzas necesarias para superar las faltas graves y leves que por nuestra debilidad humana cometemos.
Ernesto Martín Valdez Zambrano
El que participa del alimento eucarístico supera la muerte. El mismo Señor fue el que mandó el encargo de celebrar. El que caiga en faltas leves acérquese al Señor no se aleje pues de él le puede venir el perdón de sus faltas. Con el pan y vino perduramos en esta vida, pero con su cuerpo y sangre tenemos vida perdurable e inmortal. No hay entre los hombres ninguno digno de recibir el cuerpo y sangre de Cristo, pero por su don todos podemos tomarlo. Por intermedio de los pontífices Dios nos perdona nuestras faltas cometidas.
ResponderEliminarIsaac Esaú Guzmán Torres
Teodoro nos hace ver que la Eucaristía no es un símbolo, sino que realmente es Cuerpo y Sangre de Cristo por acción del Espíritu Santo, no es invención humana, sino mandato de Cristo. Insiste en que es alimento de inmortalidad que se nos da en el sacrificio de la cruz, por ello la misa tiene carácter sacrificial y memorial. Nos dice que no debemos dejar de comulgar por cualquier pecado leve, pues necesitamos ser alimentados por Quien nacimos en el Bautismo, y fuimos incorporados a Él, nunca seremos lo suficientemente dignos para recibirlo, son los méritos y misericordia de Jesús por lo que lo hacemos. Habla de la confesión, de la confianza que debemos tener y el secreto que debe guardar el sacerdote.FRANCISCO JAVIER CERVANTES RAMÍREZ
ResponderEliminarFue monje, después abandona el monasterio para casarse y se hace abogado. Movido por su amigo Juan Crisóstomo vuelve a la vida monástica. Muere siendo obispo en el 428. Su principal obra se titula "sobre la encarnación". En cuanto a la Eucaristía indica que el pan y el vino se convierten en cuerpo y sangre gracias a las palabras pronunciadas por el ministro ordenado. Asegura que el que participe de éste alimento es superior a la muerte pues esta llamado a resucitar. Pide como todos los demás que quien cae en faltas leves provocadas por la debilidad humana no se aleje de la Eucaristía, pues lo ayudará a superar el pecado. Habla de la Eucaristía como memorial de la muerte de Cristo. Invita a los cristianos a que, en el Amén que se responde antes de recibir la Eucaristía reconozcan al mismo Dios, superando lo que aparece a los sentidos. Asegura el perdón de los pecados a través de los sacerdotes pues "nos hace libres de la venganza futura".
ResponderEliminarEn este escrito este Obispo y Padre de la Iglesia nos dice que todos los hombres somos indignos de recibir el cuerpo del Señor, por que nuestra naturaleza tiende al mal, que por su naturaleza es corruptibles y mortal, por eso somos indignos de participar en ese Sagrado Banquete, pero es la gran Misericordia de Dios por lo que nos podemos acercar a este alimento celestial, el don de ese gran amor y esa gran misericordia es la que nos hace dignos de participar en la Eucaristía
ResponderEliminarNos muestra la Eucaristía como alimento de vida eterna, pues el que se alimenta de ella supera la muerte. Distingue entre pecado mortal y venial y dice que no se ha de apartar de la Eucaristía el que comete pecados leves. Preciosamente nos habla de que la comunión es una conjunción con Él, nuestra cabeza, de los que formamos su cuerpo. ARMANDO GONZÁLEZ
ResponderEliminarTeodoro de Mopsuestia.
ResponderEliminarEl que recibe y se alimenta de la Eucaristía supera la muerte porque sin duda quien se alimenta de este alimento logra la vida eterna otorgada por Dios mismo; Así la carne de Cristo, unida a la naturaleza Divina, es la que da vida, la Eucaristía no es mera invención humana, sino “invención Divina” fue el mismo Señor quien encargara a su Iglesia celebrar en memoria suya, por eso la importancia del testimonio, recibirlo a Cristo, con respeto y amor reverencial, y no en pecado.
Con Aprecio y estima: Rivas Mariscal Sebastián.
Teodoro de Mopsuestia
ResponderEliminarEn estos textos se hace de manera directa alusión a otro sacramento de la Iglesia: la confesión, al cual los fieles sean de acercar con confianza, ya que los ministros de la penitencia perdonan los pecados en virtud del encargo de Jesucristo, el perdón de los pecados Cristo no lo ha obtenido por su muerte y resurrección. El Misterio Pascual es conmemorado en cada Eucaristía, por mandato divino la eucaristía se seguirá celebrando para que se haga presente Cristo de manera real en las especias eucarísticas: alimento de vida eterna. Fabián Estrada Campos
Teodoro de Mopsuestia:
ResponderEliminarDeja clara la realidad sustancial de la eucaristía como cuerpo de Cristo y no solamente símbolo, pues la carne no es útil al alma sino la naturaleza divina e incorpórea, aunque, evitando el dualismo, asegura que es por la carne que se comunica la vida del espíritu.
Trata también un tema que considero necesario retomar: la inmortalidad, la cual es dad a los que comen el Cuerpo de Cristo. Creo que la razón de la pérdida del sentido de la existencia es la pérdida del sentido de la trascendencia.
La Eucaristía supera la muerte porque sin duda quien se alimenta de este alimento logra la vida eterna otorgada por Dios mismo y no por méritos propios, ya que no se debe alejar del Señor quien comete pecados veniales, sino que debe fortalecerse para no volver a pecar y ser digno de recibir la Eucaristía. Esta es nuestra esperanza cuando hacemos todo por cumplir la voluntad de Dios es lo que hace la diferencia del que vive solo para sí mismo y que piensa solo en el gozo efímero y aquel que trabaja todos los días por la esperanza puesta en Jesucristo que lo va a salvar.
ResponderEliminaroscar humberto rodriguez medina (T R I K I S )
Teodoro de Mopsuestia:
ResponderEliminarDos puntos que llamaron mi atención: 1.- la exhortación a la que nos invita a estar alejado de las cosas que nos apartan de Él, en su mayoría por la debilidad de la naturaleza y esforzándonos por vivir la virtud y la diligencia pueden disminuir nuestras culpas para así no apartarnos de los misterios y 2.-cuando respondemos -Amen- cuando el ministro nos presenta el Cuerpo de Cristo, no veamos solo el pan sino al mismo Cristo presentándonos con temor y con caridad.
Atte: Juan Carlos Zambrano Herrera.
Comentario a la doctrina eucarística.
ResponderEliminarTeodoro habla de la eficacia de las especies eucarísticas en cuerpo y sangre de Cristo en virtud de la acción de gracias pronunciada sobre ellas. Y aunque reconoce tal dignidad para ignorancia de muchos afirma que no se debe alejar de ella quien comete faltas leves. Algo nuevo de reconocer es que dice que quien se alimenta de la Eucaristía supera la muerte, Cristo hizo de la bebida su sangre y del pan su cuerpo para que nos diera vida eterna. Teodoro habla del sacramento de la reconciliación afirmando que Dios perdona los pecados a través de los sacerdotes.
LUIS ALFONSO GARCÍA FUENTES
para teodoro la eucaristia es el alimento que nos ayuda a superar la muerte, por lo cual invita a que el hombre no se aleje de ella pues por medio de ella el hombre se une a Dios, y cuyando el hombre esta unido a Dios se garantiza la vida inmortal
ResponderEliminarOscar Ivan Rivas Perez
Comentario de Teodoro
ResponderEliminarHabla de la Eucaristía como el manjar de la vida nuestra. En el aspecto espiritual, aprovechemos para recibir esta invitación de vivir el misterio eucarístico con una coherencia de vida, quitando nuestros pecados. Una humildad que verdaderamente nos ayude a recibir la Eucaristía. Para participar del misterio de la resurrección. Omar Gerard Leyva Cárdenas.
Doctrina eucarística
ResponderEliminarComentarios:
Comentarios y homilías catequísticas
Hoy más que nada se duda de la presencia de Jesús en la Eucaristía y no se cree que realmente esté presente en ese trocito de pan y en vino. Y Dios nos va a dar vida con este sacramento. Nuestra gente en ocasiones se abstiene de comulgar con Jesús porque piensa que está en pecado grave cuando en realidad son veniales y precisamente de allí se recoge la urgencia de catequizar para especificar la diferencia entre pecado grave y pecado venial. Somos dichosos pues el Señor nos permite comerlo sin merecimiento alguno.
Higinio Juárez Rendón
Afirma en sus Homilías catequísticas que la comunión es una conjunción con Él, nuestra cabeza, de los que formamos su cuerpo. Cuando nos alimentamos todos de un mismo cuerpo, el de Él, todos llegamos a ser el único cuerpo de Cristo, pues recibimos la comunión y conjunción con Él, como nuestra cabeza. De este modo estrechamos lo que hemos recibido por el bautismo-
ResponderEliminarNos habla de que el cuerpo y la sangre de Cristo no son símbolos sino que es un hecho real, ya que Cristo no dijo “Esto es el símbolo de mi cuerpo y esto de mi sangre, sino: Esto es mi cuerpo y mi sangre” y con esto debemos ir más allá de las apariencias de la naturaleza. Con este alimento, nos enseña, seremos superiores a la muerte, pues no hemos de morir, ya que Dios mismo se presenta como un Dios de vivos y no de muertos. Además, la divinidad de Cristo es la que nos da Vida a través de su cuerpo, puesto que el solo cuerpo no nos aportaría nada, y esto se logra gracias al Espíritu Santo “que vivifica”.
ResponderEliminarRetoma lo que san Agustín ya nos había recomendado, que por faltas leves no nos alejemos de la Eucaristía y que “conviene trabajar lo posible por estar lejos de aquellas otras cosas en las que suelen caer los hombres… el deseo de la virtud y la diligencia cotidiana de la vida pueden disminuir enteramente tales pecados, y los que caen en ellos no deben privarse de los misterios… porque de ahí podemos conseguir el perdón de los pecados”.
Eduardo Camacho Nieves