Comienza diciendo que la Eucaristía es el testamento nuevo para los que creen en Jesucristo, los bautizados, y es su auténtico alimento. Los bautizados celebramos un pacto o alianza con Dios cada vez que participamos en la Eucaristía, cada vez que comulgamos. Por la Palabra de Dios, el Verbo que se hizo hombre, se ha creado todo: también puede hacer del pan de su cuerpo y del vino, su sangre. El poder de la Palabra o Verbo de Dios es muy grande y se ha manifestado de muchas maneras. No dudemos jamás de que el mismo Verbo se hace presente en cada Eucaristía, haciendo la conversión de las sustancias de pan y vino en su Cuerpo y su Sangre. La Eucaristía alcanza el perdón de los pecados, la vida eterna y la defensa del alma y del cuerpo a los que la reciben dignamente; recibida indignamente, es causa de castigo. La Eucaristía, es la brasa unida al fuego de la divinidad, el mismo cuerpo de Cristo crucificado. Ese fuego de amor quema nuestros pecados, ilumina nuestros corazones y nos deifica. La comunión eucarística nos hace participar de la divinidad de Jesús y nos une en un solo cuerpo, el de Cristo, a todos los que comulgamos. La unión con Cristo y la unión con los demás, que adquirimos en la comunión, vivámosla en nuestra vida diaria. Seamos personas de unidad, de paz, de armonía. ÁLVARO VÁZQUEZ MONTES.
La doctrina eucarística de San Juan Damaceno está llena de el ardor del espíritu Santo. Habla de la eucaristía como la nueva y definitiva Alianza entre los cristianos y Dios. Además la eucaristía es la brasa ardiente que es capaz de llenar los corazones del Amor divino que todo hombre necesita. Pero, no es recomendable, según nuestro santo padre comulgar el cuerpo de Cristo indignamente. Por José Luis González Ramírez
San Juan Damasceno habla del paralelismo entre el AT y el NT, y da a la Eucaristía el signo del cumplimiento de todo lo del AT, manjar para todos los que creen en Jesucristo: Palabra creadora. Ese Dios que de lo ordinario y familiar realiza cosas que están sobre la naturaleza, por medio de estas cosas ordinarias en la naturaleza: comer y beber el pan y el vino que es algo natural, Dios lo transforma en algo sobrenatural porque ya no es pan y vino, sino el milagro de transubstanciación, por esto es necesaria la fe, pues si lo hicieran como algo ordinario les será causa de castigo y suplicio, además de que nada le aprovecharía. El Damasceno recomienda como debemos presentarnos a recibir la eucaristía y pues Dios comunica muchisimos beneficios (que juan menciona) que contrae el contacto con el santo sacramento, dando mucha importancia al significado de la comunión, recalcando como "nuestra naturaleza es hecha consorte de la naturaleza divina". BARAJAS RUEDAS J. FELIPE DE JESUS
JUAN DAMASCENO En su De fide orthodoxa, en la sección de los santos e inmaculados Misterios del Señor, el Damasceno nos dice que, si Cristo creó el cielo y la tierra y todo lo que contienen, si se hizo hombre y tomó carne de la Virgen... ¡cómo no podrá hacer Cuerpo al pan y Sangre al vino! Dios se vale de als cosas comunes y ordinarias (agua, Dios se vale de las cosas comunes y ordinarias (agua, pan, vino) para los signos de los Sacramentos.... FERNANDO VÁZQUEZ BAÑUELOS
Nos comenta que La Eucaristía nos fortalece y nos alcanza el perdón de los pecados y es la defensa del alma y del cuerpo para quienes en realidad comulgan dignamente. Nos comenta que al recibir el cuerpo de Cristo, en realidad recibimos una brasa ardiendo de amor y el cual al recibir la cominión nos hacemos participes de la divinidad de Cristo. Enrique Hernández Osorio
Juan Damaseno nos enseña: 1. La Eucaristía es el NT además es el alimento para los bautisados. 2. La eucaristía se convierte en un pacto cada vez que comulgamos. 3. La eucaristía es una brasa de amor que nos hace participes de la divinidad a quien la recibe dignamente.
SAN JUAN DAMASCENO Lo familiar que tenemos con Dios se lo debemos a la encarnación del Verbo que se hizo como nosotros para poder comunicarnos lo que Dios en sí mismo es, y la relación que tiene que ver con nuestra naturaleza, pues Dios nos demostró que no es un Dios lejano, sino íntimamente próximo a nosotros, cosa que los ángeles gozan en plenitud. José Becerra Enciso
La Eucaristía alcanza el perdón de los pecados, la vida eterna y la defensa del alma y del cuerpo a los que la reciben dignamente; recibida indignamente, es causa de castigo. la eucaristía es la brasa ardiente que es capaz de llenar los corazones del Amor divino que todo hombre necesita, para poder participar dignamente del cuerpo de Cristo.. La comunión eucarística nos hace participar de la divinidad de Jesús y nos une en un solo cuerpo, el de Cristo, a todos los que comulgamos. Jose Alberto Rocha Rodriguez ..
El último padre de Oriente, San Juan Damasceno si todo fue hecho por la palabra de Dios, el mismo Verbo se hizo carne y puede así ser la eucaristía Cuerpo y Sangre de Cristo. Quien lo recibe diariamente se alimenta para la vida eterna, pero quien lo recibe indignamente le será castigo y suplicio. Por la Eucaristía comulgamos unos con otros y recibimos la carne de Cristo y su divinidad. Los ángeles no participan de la naturaleza divina, pero quien recibe el Cuerpo y Sangre de Cristo se unen a él. ATTE. SERGIO A. GARDUÑO OSORIO
Al comulgar, se exige que el hombre logre tener un cambio de vida; ese cambio es llamada conversión. Ya se nos ha hablado que quien reciba indignamente el Cuerpo de Cristo; corromperá su cuerpo y su alma, el pan Eucarístico recibido dignamente, nos une a la divinidad, y nos unifica con su gracia. Es el don más apreciado de la religión Católica, porque allí el Verbo de Dios, se ha hecho Carne. González Loza José Emmanuel.
El último Padre de la Iglesia, Juan Damasceno, nos habla de un aspecto importante de la Eucaristía que me llamo mucho la atención, que la palabra de Jesucristo que es el Verbo que se ha hecho carne, puede hacer que se convierta el pan en su Cuerpo y el vino que se convierta en su sangre, empleando cosas familiares y ordinarias de la naturaleza que nos hace participar de la divinidad de Jesucristo y nos une a su cuerpo. Jacobo Sandoval Betancourt
Nos recuerda que Cristo se ofreció como un testamento nuevo para todos los que crean en él. Indica que si Dios ha actuado en la Creación y en la Encarnación, cuanto más en hacerce presente en el Pan y el vino; los cuales son elementos sencillos en los que Dios manifiesta que fortalece nuestra fragilidad humana. De igual modo el recibir la Eucaristía aprovecha para la vida eterna, pero quien le recibe indignamente les es castigo.
DOCTRINA EUCARÍSTICA E SAN JUAN DAMASCENO Dice san Juan Damasceno que la Eucaristía es el testamento nuevo para los que creen en Jesucristo, los bautizados y es su auténtico alimento que gracias al poder de la palabra, el verbo se hace presente en cada Eucaristía. Lo maravilloso de Dios es que se vale de cosas ordinarias y familiares para el hombre para comunicarle su vida… eso es maravillosos y sucede a diario sólo que muy pocas veces nos damos cuenta de ello y de muchas cosas más que nos trae la Eucaristía, por decir algo, el hecho de poder recibir el Cuerpo y la Sangre de nuestro Señor, cosa que no les es dada ni a los ángeles… que esto nos motive a verdaderamente celebrar y vivir la Eucaristía… Roberto García Durán.
SAN JUAN DAMACENEO Hace bien el santo al referirse que la eucaristia es el nuevo testamento para los que creen en Cristo, pues es la nueva alianza sellada por Cristo en su cuerpo y su sangre quien confiere al nuevo creyente una nueva dimensión y visión de la situación que vive. El sacrificio y alianza del antiguo testamento, ya predisponia el sacrificio definitivo de Cristo. por la palabra de Dios nos relata San Juan el vervo se hizo carne, por ella se creo todo, así pues por el pan y el vino los convierte en su cuerpo y su sangre. La eucaristia alcanza el perdon de los pecados, la vida eterna, al defensa del alma y del cuerpo, nos hace participar de la divinidad de Jesús y nos une en un solo cuerpo, donde él es la cabeza y la iglesia su cuerpo. COMENTARIO ERICK PRECIADO SANTANA
El manjar de la Eucaristía, Pan de Vida, Cristo bajado del cielo y entregado a quines creen en élpor sus discípulos desde la última cena; por la Palabra de Cristo su Cuerpo y su Sangre permanecen en el Pan y el Vino tomados de los dones naturales convirtiéndolos en alimento sobrenatural de manera que al recibirlos dignamente nos aprovechan para la vida eterna iluminando ahora nuestros corazones y haciéndolos partícipes de la divinidad de Cristo y de la comunión con los demás dones altamente superiores a los recibidos por los ángeles mismos. Juan Carlos Eduardo Gómez Limón, saludos y Feliz año nuevo 2012.
Es considerado como el último de los Padres de la Iglesia de Oriente. Su pensamiento sobre la Eucaristía es una rica fuente que nos lleva a ver en la Eucaristía un testamento al que todos los bautizados pueden acceder. Amar la Eucaristía porque nos une a Cristo, nos comunica su vida divina, entre otras; San Juan Damasceno nos interpela a reconocer dentro de la santa misa que Jesús quiere estar con nosotros y que nosotros debemos corresponder a tan gran invitación. Juan José Sánchez D.
el testamento que Jesús deja a su iglesia es su propio cuerpo,entregado por amor a la humanidad, y lo hace de un modo ordinario para comunicar al hombre lo extrahordinario y lleguemos asi a recibir la vida eterna que se nos ha hecho participe por la divinidad de Jesucristo que se nos entrega en la comunion de su cuerpo y su sangre. Eudaldo Torres Perez. Saludos pater.
Realza la alianza como nuevo Testamento de unidad con El. se ha hecho hombre para hacernos de su Cuerpo y de su Sangre, para darnos vida Divina y el perdon de los pecados. la Eucaristia nos une a Cristo y nos hace participar de su naturaleza Divina. Jorge Gutiérrez Arellano.
San Juan Damasceno resalta que en el bautismo Cristo hace un pacto con nosotros y nos da un nuevo testamento que se actualiza cada vez que nos alimentamos en la Eucaristía y como alianza que es hemos de cumplirla y serle fieles a Cristo, ya que él siempre es fiel y cómo no hemos de creerle, pues él creó todo cuanto existe, él puede convertir el pan en su Cuerpo y el vino en su Sangre, lo cual es el sello de su alianza con nosotros. Oscar Noé Meléndez Miranda
San Juan Damasceno El sacerdote consagra el pan y el vino en el cuerpo y la sangre de Cristo, no por sus palabras, sino por las mismas palabras de Cristo verbo encarnado. De ahí que el sacerdote no puede darse el lujo de cambiar el texto de la plegaria Eucarística, sean las razones que sean. La sagrada comunión si bien se recibe para conveniencia propia, puede aprovechar al que la recibe de manera distinta, dependiendo de la dignidad con la que la reciba o de la indignidad y falta de fe con que se pueda recibir, pues para quien la recibe dignamente, alcanza el perdón de los pecados, la vida eterna y la defensa del alma y del cuerpo, mas para quien la recibe indignamente y sin fe, comete sacrilegio y le es no para bien, sino motivo de castigo y suplicio. Mateo López Rodríguez
El bautizado tratara de vivir en coherencia, pues ha renacido del agua y del Espirítu Jn 3,5. Debe además ardientemente tener deseo de recibir la Eucaristía que es el Pan unido a la divinidad... Néstor Ricardo Mariscal Álvarez. min.
San Juan Damasceno nos explica que la Eucaristía es el Pan de Vida, el mismo Cristo, quien a su ves la ha isntituído y que en virtud de sus Palabras se realiza tan magnífico prodigio, y que Él mismo une su divinidad a el Pan y el Vino, pasando éstas especies de su naturaleza propia a lo Sobrenatural de la cual nos hace consortes al unirnos a todos los fieles a su Cuerpo mediante la comunión, formando así un sólo cuerpo con Él; por ello hemos de recibirlo, los fieles, con dignidad y fe, para que nos aproveche para la vida eterna, de lo contrario nos alcanza la condena.
San Juan Damasceno La Eucaristía es para el hombre la vida que nos libra de la muerte, puesto que es la que da vida a todo hombre y el alimento que nos purifica y lava de nuestros pecados. Por ello debemos de poner todo nuestro empeño para unirnos a Cristo, por medio de su Cuerpo y de su Sangre.
SAN JUAN DAMASCENO Doctrina Eucarística. La Eucaristía es el testamento nuevo para quienes creen en Jesucristo, la Eucaristía alcanza el perdón de los pecados, la vida eterna y la defensa del alma y del cuerpo a los que la reciben dignamente, también nos enseña que la Eucaristía nos participa de la divinidad de Jesucristo y nos une a su cuerpo, ABRAHAM MERCADO CASTRO.
San Juan Damasceno presenta el poder de Dios en la creación pues si por su palabra ha creado todo y por su palabra se hizo carne. No dudemos de Él porque el ha dicho con la misma palabra creadora este es mi cuerpo y esta es mi sangre, es Cristo quien lo ha dicho y lo que dice se hace realidad. att. Fernando Aguilera González
El último padre de la Iglesia de oriente nos dice que la Eucaristía es el Testamento nuevo para todos nosotros que creemos en él y así como por el Verbo todo fue creado, por su Palabra el pan se convierte en su carne y el vino en su sangre. Al recibirlo alcanzamos el perdón de nuestros pecado y la protección de nuestro Señor si lo recibimos dignamente y nos une en un sólo cuerpo que es el de Cristo. Los ángeles aún cuando ven a Dios cara a cara no lo pueden recibir como nosotros. Qué grande privilegio! Muchas gracias paisano!!! Dios lo bendiga.
San Juan Damasceno: es el último padre de la iglesia de Oriente, defiende la ortodoxia cristiana contra la herejía iconoclasta culto a las imágenes, la Eucaristía es el testamento nuevo para los que creen en Jesucristo, y es un autentico alimento su cuerpo y su sangre, por eso se hizo el Verbo que hombre para comunicar la vida divina. Evaristo Gabriel Flores Ochoa
Doctrina Eucarística del Santo Padre JUAN DAMASCENO [Comentario: David Gutiérrez Murillo, 2° Teol.] Considerado como el último Padre de la Iglesia en Oriente. En Sobre la fe ortodoxa, nos enseña que Jesucristo estableció un testamento nuevo para sus santos discípulos y apóstoles, y por medio de ellos para todos los que creen en Él: y es nada más y nada menos que el mismo Pan de Vida. Nos recuerda que si todo fue creado mediante el Verbo, ¿no podrá ese Verbo hacerse Cuerpo y Sangre para nosotros? Enseguida algo que los duros de corazón no pueden admitir: la simplicidad de Dios. Dios toma lo ordinario para comunicarnos su vida divina: ya que los hombres suelen comer pan y beber vino, unió a ellos su divinidad, e hizo a estas cosas su cuerpo y su sangre para que por medio de las cosas ordinarias y naturales lleguemos a las que están sobre la naturaleza. La Eucaristía nos alcanza el perdón de los pecados y nos une íntimamente a Cristo [como el fuego y la braza] haciéndonos partícipes de su divinidad, cosa de la que ni los mismos ángeles pueden participar. [Esto me acaba de estremecer… ¡Dios mío!]
Considera ala Eucaristía como el testamento de los que cren en Cristo, pues si el que creo todo con su Palabra ¿no podria hacer del pan su Cuerpo y del agua y el vino su Sangre? Él emplea algo ordinario(pan y vino) porque conoce muy bien la debilidad humana, sabiendo que los hombres usan el agua para lavarse y el aceite para ungirse, unio aal agua y al aceite la gracia del Espíritu haciendo con ello un baño de regeneración. Quien recibe dignamente y con fe la Eucaristía le aprovecha para el perdón de los pecados, para la vida eterna y para defensa del alma, de lo contrario para castigo y suplicio. La Eucaristía es la brasa unida al fuego del amor divinoque quema el pecado, ilumina nuestro corazón; ni los ángeles se unen al amor divino como lo hacen los hombres. JUAN MANUEL ÁLVAREZ MAYORGA
San Juan Damasceno: Hermosa su doctrina del Verbo por el cual todo se hizo y que por voluntad propia se hizo hombre. La fuerza de esa Palabra hace al Pan y al vino su Cuerpo y Sangre. La pedagogía divina hace que de las cosas de la naturaleza se nos transmitan gracias inefables (agua y aceite en el bautismo, pan y vino en la Eucaristía); así es Dios, no cabe duda: se empequeñece y se hace ordinario para hacernos grandes y obrar lo extraordinario en nosotros. Concientiza en su doctrina de recibirlo bien para recibir el torrente de gracias (y no la propia condena); a veces nos podemos arrutinar y no discernir lo que comemos, creo que es un gran peligro para los que tenemos la dicha de recibirle diario si no estamos atentos. José Antonio Larios Suárez.
San Juan Damasceno La Eucaristía es el signo visible de Cristo entre nosotros de ahí que Cristo está vivo si comprendiéramos esto los cristianos no buscarían ningún otro lugar donde encontrar la felicidad. Pues la Eucaristía es el camino para la vida eterna donde, el hombre se encontrara con Dios y disfrutara de su presencia. Jose Guadalupe Jimenez Nuñez.
San Juan Damasceno El sacramento de la Eucaristía es el alimento verdadero del los cristianos y el medio por el cual, Cristo ofrece su vida divina al hombre; no obstante, debemos estar alertas a no tomar este alimento en conciencia de pecado grave, pues en vez de alimentarnos, no afectaría (nos condena, es tan complaciente saber que el hombre, como lo afirma san Juan Damasceno,disfruta de esta unión divina con Cristo a través de la Eucaristía, inclusive sobre los ángeles.
Juan nos dice que si por la Palabra de Dios todo lo creado se hizo incluso el hombre, también por la Palabra se hace el pan en cuerpo y el vino en sangre de Cristo; los que reciben de manera digna la Eucaristía les perdona los pecados para la vida eterna; por medio de la Eucaristía nos unimos todos por participar de un mismo pan, así formamos un solo cuerpo de Cristo.
El mayor testamento que Cristo nos dejó tanto a los apóstoles y a nosotros es la Eucaristía, nos dice el damasceno, pues los ángeles no pueden participar de ella. Nos muestra que si Dios es capaz de la creación y que el Verbo se hiciera hombre, con mayor razón el dar su cuerpo en la Eucaristía. Es por cosas cercanas a nosotros Dios nos comunica sus gracias sobrenaturales, por el pan y el vino. La Eucaristía nos perdona los pecados, nos da la vida eterna si lo comulgamos dignamente, si no nos trae castigo y suplicio, por lo cual debemos pedir a Dios que nos queme cual braza viva para que nos transforme. La Eucaristía nos une a Dios y entre nosotros, nos enseña este santo padre. FRANCISCO JAVIER CERVANTES RAMÍREZ
Este último Padre de la Iglesia de Oriente es toda una fuente de conocimiento y expone de manera clara la doctrina ortodoxa. Nacemos por el bautismo; y nuestro alimento es la Eucaristía. En la encarnación, la Palabra de Dios se hizo hombre, ahora, el mismo verbo se hace alimento de los hombres. De esta forma Dios emplea lo ordinario para comunicar su vida divina, el perdón de los pecados, la vida eterna, la defensa del alma y del cuerpo a los que reciben la Eucaristía. Es un privilegio exclusivo para los humanos la Eucaristía, ya que ni los ángeles pueden comerlo.
El último Padre de la Iglesia de Oriente y de la gran época patrística nos enseña como el hombre es privilegiado para unirse a la naturaleza divina al participar de la santa Eucaristía, que es algo que ni los ángeles, que son seres perfectos pueden hacer. Los hombres recibimos el Cuerpo de Cristo y esto nos une hipostáticamente a Él, y por eso no nos podremos nunca separar de Cristo, ojala este misterio nos ayude para acercarnos más a la mesa santa de la Eucaristía
El nacimiento se nos ha dado por el bautismo, y el manjar es el mismo pan de vida, nuestro Señor Jesucristo que bajó del cielo. Estando nosotros para recibir la muerte, Él estableció un nuevo testamento para sus discípulos y para quienes todos los que creen en Él por medio de ellos. Afirma que, ni los mismos ángeles se unen a la naturaleza divina como lo hacen los hombres por la participación eucarística. ARMANDO GONZÁLEZ
Si comprendiésemos muchos fieles que la presencia viva entre nosotros, de Cristo se encuentra en la Eucaristía. Muchos jóvenes, niños, adultos, ancianos, pronto contemplarían la irradiación que sale de Él, la felicidad que nos brinda El, la oración que nos hace jóvenes. No todos los fieles son así, ignorantes, o que prescinden de este sacramento, sino, que si hay gran parte que si comprenden esta presencia viva, verdadera, de Cristo. Es el hombre de hoy, es el niño de hoy, es el anciano de hoy, por eso ni los Ángeles se unen a la naturaleza divina como lo hacen los hombres de hoy, por la participación en el banquete tan sagrado, que es la Eucaristía. Con Aprecio y estima: Rivas Mariscal Sebastián.
Muy cierto lo que dice san Juan Damasceno al concluir que si Dios por su Palabra hizo el cielo, la tierra, el agua, el fuego y el aire e incluso al mismo hombre y por su voluntad se hizo hombre tomando carne de la sangre de la purisima Virgen María sin intervención del varón ¿acaso no podrá hacer al pan cuerpo suyo y al vino y al agua su sangre? Para Dios nada es imposible, el hombre es el que se cómplica la vida y se ahoga en un vaso de agua.
San Juan Damasceno Los hombres son las únicas creaturas que gozan de alimentarse del cuerpo de Cristo verdadero Dios y hombre, es el poder de la Palabra Creadora la que hace posible que el par alimento ordinario del hombre se convierta en la carne del hijo de Dios. La celebración de la Eucaristía es la celebración de alianza de amor pactada con Dios por Cristo y en Cristo. Fabián Estrada Campos.
Dios con la naturaleza humana emplea las cosas ordinarias para poder comunicarse con el hombre. La eucaristía alcanza el perdón de los pecados. La comunión puede ser para bien o para mal, antes de irnos a formar para comulgar, revisemos como esta nuestra alma, si de verdad esta limpia y preparada para recibir el cuerpo de Cristo.
San Juan Damasceno: El damasceno arguye la posibilidad dela transubstanciación a partir del poder de Dios creador. En la misma línea de la creación que conduce a la fe, añade que es por medios ordinarios que llegamos a gustar realidades sobrenaturales. A través de la imagen del carbón encendido nos muestra cómo la eucaristía sirve para que nuestro carbón arda en amor a Dios.
La Eucaristía es el signo visible de Cristo entre nosotros de ahí que Cristo está vivo si comprendiéramos esto los cristianos no buscaríamos ningún otro lugar donde encontrar la felicidad. Pues la Eucaristía es el camino para la vida eterna donde, el hombre se encontrara con Dios y disfrutara de su presencia. Esta es la clave para vivir en el amor y como ejemplo tenemos la comunidad de hechos de los apóstoles en donde todos Vivian en la caridad perfecta en Jesucristo. OSCAR HUMBERTO RODRIGUEZ MEDINA ( T R I K I S )
Comentario a la doctrina eucarística. Gracias a la Palabra de Dios hecha carne, las especies eucarísticas sufren la transubstanciación, de lo ordinario y cercano al hombre Dios se acerca a él para comunicarle su gracia y hacerle partícipe de su vida divina por medio de la remisión de sus pecados, gracias a la Eucaristía nos unimos a la naturaleza divina, al cuerpo místico de Cristo
es la eucaristia el testamento nuevo para los que creen en Cristo y asi como Dios hizo todas las cosas tambien él mismo tranforma el pan y el vino en su cuerpo y en su sangre y por ser de Dios este sacramento tambien perdona los pecados del hombre Oscar Ivan Rivas Perez
COMENTARIO DE SAN JUAN DAMASCENO La mayoría de los escritos eucarísticos que se tienen son de su Sobre la fe ortodoxa, específicamente, en la parte que es sobre los santos e inmaculados misterios del Señor; por lo cual, es muy interesante cuando saber que a estos misterios, específicamente, sobre los misterios de la Eucaristía los considera, por supuesto, santos e inmaculados. A la Eucaristía, dirá, que hay que considerar que se nos da para que lo recibamos “santos e inmaculados” que evitemos recibirlo indignamente, para que no recibamos castigo. Y a modo general, considera que es un sacramento por el cual Dios ha dado a los hombres, no a los Ángeles. Y nosotros, hemos de considerar su sentido sobrenatural. Dios se da como testamento nuevo y poderoso, que sólo por la fe se recibe. Omar Gerard Leyva Cárdenas.
Doctrina eucarística Comentarios: Sobre la fe ortodoxa y sermones Con facilidad perdemos la conciencia que por ser bautizados debemos estar más ligados con Dios a través de la comunión eucarística. Dios es tan capaz, el más grande que lo que dice se hace y por eso lo tenemos en la hostia consagrada. Y si dice que nos va a perdonar los pecados lo va a cumplir. Es el hombre la criatura preferida la que tiene la dicha de hacerlo presente y de comerlo. Higinio Juárez Rendón
Afirma en su doctrina Eucarística que, así como el Verbo se hizo carne para poner su morada entre nosotros, también tiene el poder para hacer que se convierta el pan en el Cuerpo y el vino en Sangre. Dios emplea las cosas ordinarias y familiares para comunicarle al hombre su vida divina. emplea pan y vino porque conoce Dios la debilidad humana.
COMENTARIO DE SAN JUAN DAMASCENO En su doctrina Eucarística nos comunica que quienes participamos de el Pan y el Vino participamos de la vida divina de Jesús. Él nos hace participe en su bautismo.Omar Gerard Leyva Cárdenas.
Nuestro santo nos dice que, de la misma forma como nacemos por medio del agua y del espíritu, así también nuestro Señor Jesucristo es un manjar para nosotros, puesto que es el mismo pan de vida bajado del cielo. Menciona que si la Palabra de Dios hizo todo lo que existe, el cielo, la tierra, el fuego, el mismo hombre, etc., e incluso el Verbo se hizo carne, también tiene poder esta misma Palabra para poder convertir el pan en su cuerpo y el vino en sangre. Dios, continúa el santo, se vale de cosas ordinarias como el pan y el vino puesto que los hombres suelen comer pan y beber agua y vino, “unió a ellos su divinidad, e hizo a estas cosas su cuerpo y su sangre para que por medio de las cosas ordinarias y naturales lleguemos a las que están sobre la naturaleza.” Finaliza el texto recordando lo que el santo menciona en su obra Sermones sobre las imágenes (sermón 3, 26), que ni siquiera los ángeles han sido creados para participar de la naturaleza divina como lo han sido los hombres, pues “son hechos consortes de la naturaleza divina, a saber, todos aquellos que reciben el santo cuerpo de Cristo y beben su sangre”. Estos autores, santos y hombres de Dios, nos han dejado un tesoro increíble a través de sus escritos que nos debería de llevar a sentirnos orgullosos de todo el camino que ha realizado Dios en su Iglesia a través de los siglos y de personas fieles a su gracia y, al mismo tiempo, agradecer su paciencia para con nosotros pues sabe que somos lentos para captar lo que él nos quiere transmitir a través de estas líneas. Eduardo Camacho Nieves
Comienza diciendo que la Eucaristía es el testamento nuevo para los que creen en Jesucristo, los bautizados, y es su auténtico alimento. Los bautizados celebramos un pacto o alianza con Dios cada vez que participamos en la Eucaristía, cada vez que comulgamos. Por la Palabra de Dios, el Verbo que se hizo hombre, se ha creado todo: también puede hacer del pan de su cuerpo y del vino, su sangre. El poder de la Palabra o Verbo de Dios es muy grande y se ha manifestado de muchas maneras. No dudemos jamás de que el mismo Verbo se hace presente en cada Eucaristía, haciendo la conversión de las sustancias de pan y vino en su Cuerpo y su Sangre. La Eucaristía alcanza el perdón de los pecados, la vida eterna y la defensa del alma y del cuerpo a los que la reciben dignamente; recibida indignamente, es causa de castigo. La Eucaristía, es la brasa unida al fuego de la divinidad, el mismo cuerpo de Cristo crucificado. Ese fuego de amor quema nuestros pecados, ilumina nuestros corazones y nos deifica. La comunión eucarística nos hace participar de la divinidad de Jesús y nos une en un solo cuerpo, el de Cristo, a todos los que comulgamos. La unión con Cristo y la unión con los demás, que adquirimos en la comunión, vivámosla en nuestra vida diaria. Seamos personas de unidad, de paz, de armonía. ÁLVARO VÁZQUEZ MONTES.
ResponderEliminarLa doctrina eucarística de San Juan Damaceno está llena de el ardor del espíritu Santo. Habla de la eucaristía como la nueva y definitiva Alianza entre los cristianos y Dios. Además la eucaristía es la brasa ardiente que es capaz de llenar los corazones del Amor divino que todo hombre necesita. Pero, no es recomendable, según nuestro santo padre comulgar el cuerpo de Cristo indignamente. Por José Luis González Ramírez
ResponderEliminarSan Juan Damasceno habla del paralelismo entre el AT y el NT, y da a la Eucaristía el signo del cumplimiento de todo lo del AT, manjar para todos los que creen en Jesucristo: Palabra creadora. Ese Dios que de lo ordinario y familiar realiza cosas que están sobre la naturaleza, por medio de estas cosas ordinarias en la naturaleza: comer y beber el pan y el vino que es algo natural, Dios lo transforma en algo sobrenatural porque ya no es pan y vino, sino el milagro de transubstanciación, por esto es necesaria la fe, pues si lo hicieran como algo ordinario les será causa de castigo y suplicio, además de que nada le aprovecharía. El Damasceno recomienda como debemos presentarnos a recibir la eucaristía y pues Dios comunica muchisimos beneficios (que juan menciona) que contrae el contacto con el santo sacramento, dando mucha importancia al significado de la comunión, recalcando como "nuestra naturaleza es hecha consorte de la naturaleza divina". BARAJAS RUEDAS J. FELIPE DE JESUS
ResponderEliminarJUAN DAMASCENO
ResponderEliminarEn su De fide orthodoxa, en la sección de los santos e inmaculados Misterios del Señor, el Damasceno nos dice que, si Cristo creó el cielo y la tierra y todo lo que contienen, si se hizo hombre y tomó carne de la Virgen... ¡cómo no podrá hacer Cuerpo al pan y Sangre al vino! Dios se vale de als cosas comunes y ordinarias (agua, Dios se vale de las cosas comunes y ordinarias (agua, pan, vino) para los signos de los Sacramentos....
FERNANDO VÁZQUEZ BAÑUELOS
Y ya acabamos los comentarios!!....
Nos comenta que La Eucaristía nos fortalece y nos alcanza el perdón de los pecados y es la defensa del alma y del cuerpo para quienes en realidad comulgan dignamente. Nos comenta que al recibir el cuerpo de Cristo, en realidad recibimos una brasa ardiendo de amor y el cual al recibir la cominión nos hacemos participes de la divinidad de Cristo.
ResponderEliminarEnrique Hernández Osorio
Juan Damaseno nos enseña:
ResponderEliminar1. La Eucaristía es el NT además es el alimento para los bautisados.
2. La eucaristía se convierte en un pacto cada vez que comulgamos.
3. La eucaristía es una brasa de amor que nos hace participes de la divinidad a quien la recibe dignamente.
Att. Francisco Javier Murillo Chávez.
SAN JUAN DAMASCENO
ResponderEliminarLo familiar que tenemos con Dios se lo debemos a la encarnación del Verbo que se hizo como nosotros para poder comunicarnos lo que Dios en sí mismo es, y la relación que tiene que ver con nuestra naturaleza, pues Dios nos demostró que no es un Dios lejano, sino íntimamente próximo a nosotros, cosa que los ángeles gozan en plenitud.
José Becerra Enciso
La Eucaristía alcanza el perdón de los pecados, la vida eterna y la defensa del alma y del cuerpo a los que la reciben dignamente; recibida indignamente, es causa de castigo. la eucaristía es la brasa ardiente que es capaz de llenar los corazones del Amor divino que todo hombre necesita, para poder participar dignamente del cuerpo de Cristo.. La comunión eucarística nos hace participar de la divinidad de Jesús y nos une en un solo cuerpo, el de Cristo, a todos los que comulgamos.
ResponderEliminarJose Alberto Rocha Rodriguez ..
El último padre de Oriente, San Juan Damasceno si todo fue hecho por la palabra de Dios, el mismo Verbo se hizo carne y puede así ser la eucaristía Cuerpo y Sangre de Cristo. Quien lo recibe diariamente se alimenta para la vida eterna, pero quien lo recibe indignamente le será castigo y suplicio. Por la Eucaristía comulgamos unos con otros y recibimos la carne de Cristo y su divinidad. Los ángeles no participan de la naturaleza divina, pero quien recibe el Cuerpo y Sangre de Cristo se unen a él.
ResponderEliminarATTE. SERGIO A. GARDUÑO OSORIO
COMENTARIO EUCARÍSTICO DE SAN JUAN DAMASCENO
ResponderEliminarAl comulgar, se exige que el hombre logre tener un cambio de vida; ese cambio es llamada conversión. Ya se nos ha hablado que quien reciba indignamente el Cuerpo de Cristo; corromperá su cuerpo y su alma, el pan Eucarístico recibido dignamente, nos une a la divinidad, y nos unifica con su gracia. Es el don más apreciado de la religión Católica, porque allí el Verbo de Dios, se ha hecho Carne.
González Loza José Emmanuel.
Le deso Feliz año nuevo
ResponderEliminarEl último Padre de la Iglesia, Juan Damasceno, nos habla de un aspecto importante de la Eucaristía que me llamo mucho la atención, que la palabra de Jesucristo que es el Verbo que se ha hecho carne, puede hacer que se convierta el pan en su Cuerpo y el vino que se convierta en su sangre, empleando cosas familiares y ordinarias de la naturaleza que nos hace participar de la divinidad de Jesucristo y nos une a su cuerpo.
ResponderEliminarJacobo Sandoval Betancourt
San Juan Damasceno
ResponderEliminarNos recuerda que Cristo se ofreció como un testamento nuevo para todos los que crean en él. Indica que si Dios ha actuado en la Creación y en la Encarnación, cuanto más en hacerce presente en el Pan y el vino; los cuales son elementos sencillos en los que Dios manifiesta que fortalece nuestra fragilidad humana. De igual modo el recibir la Eucaristía aprovecha para la vida eterna, pero quien le recibe indignamente les es castigo.
DOCTRINA EUCARÍSTICA E SAN JUAN DAMASCENO
ResponderEliminarDice san Juan Damasceno que la Eucaristía es el testamento nuevo para los que creen en Jesucristo, los bautizados y es su auténtico alimento que gracias al poder de la palabra, el verbo se hace presente en cada Eucaristía.
Lo maravilloso de Dios es que se vale de cosas ordinarias y familiares para el hombre para comunicarle su vida… eso es maravillosos y sucede a diario sólo que muy pocas veces nos damos cuenta de ello y de muchas cosas más que nos trae la Eucaristía, por decir algo, el hecho de poder recibir el Cuerpo y la Sangre de nuestro Señor, cosa que no les es dada ni a los ángeles… que esto nos motive a verdaderamente celebrar y vivir la Eucaristía… Roberto García Durán.
SAN JUAN DAMACENEO
ResponderEliminarHace bien el santo al referirse que la eucaristia es el nuevo testamento para los que creen en Cristo, pues es la nueva alianza sellada por Cristo en su cuerpo y su sangre quien confiere al nuevo creyente una nueva dimensión y visión de la situación que vive. El sacrificio y alianza del antiguo testamento, ya predisponia el sacrificio definitivo de Cristo.
por la palabra de Dios nos relata San Juan el vervo se hizo carne, por ella se creo todo, así pues por el pan y el vino los convierte en su cuerpo y su sangre. La eucaristia alcanza el perdon de los pecados, la vida eterna, al defensa del alma y del cuerpo, nos hace participar de la divinidad de Jesús y nos une en un solo cuerpo, donde él es la cabeza y la iglesia su cuerpo.
COMENTARIO ERICK PRECIADO SANTANA
El manjar de la Eucaristía, Pan de Vida, Cristo bajado del cielo y entregado a quines creen en élpor sus discípulos desde la última cena; por la Palabra de Cristo su Cuerpo y su Sangre permanecen en el Pan y el Vino tomados de los dones naturales convirtiéndolos en alimento sobrenatural de manera que al recibirlos dignamente nos aprovechan para la vida eterna iluminando ahora nuestros corazones y haciéndolos partícipes de la divinidad de Cristo y de la comunión con los demás dones altamente superiores a los recibidos por los ángeles mismos. Juan Carlos Eduardo Gómez Limón, saludos y Feliz año nuevo 2012.
ResponderEliminarEs considerado como el último de los Padres de la Iglesia de Oriente. Su pensamiento sobre la Eucaristía es una rica fuente que nos lleva a ver en la Eucaristía un testamento al que todos los bautizados pueden acceder. Amar la Eucaristía porque nos une a Cristo, nos comunica su vida divina, entre otras; San Juan Damasceno nos interpela a reconocer dentro de la santa misa que Jesús quiere estar con nosotros y que nosotros debemos corresponder a tan gran invitación. Juan José Sánchez D.
ResponderEliminarel testamento que Jesús deja a su iglesia es su propio cuerpo,entregado por amor a la humanidad, y lo hace de un modo ordinario para comunicar al hombre lo extrahordinario y lleguemos asi a recibir la vida eterna que se nos ha hecho participe por la divinidad de Jesucristo que se nos entrega en la comunion de su cuerpo y su sangre.
ResponderEliminarEudaldo Torres Perez. Saludos pater.
Realza la alianza como nuevo Testamento de unidad con El.
ResponderEliminarse ha hecho hombre para hacernos de su Cuerpo y de su Sangre, para darnos vida Divina y el perdon de los pecados.
la Eucaristia nos une a Cristo y nos hace participar de su naturaleza Divina.
Jorge Gutiérrez Arellano.
San Juan Damasceno resalta que en el bautismo Cristo hace un pacto con nosotros y nos da un nuevo testamento que se actualiza cada vez que nos alimentamos en la Eucaristía y como alianza que es hemos de cumplirla y serle fieles a Cristo, ya que él siempre es fiel y cómo no hemos de creerle, pues él creó todo cuanto existe, él puede convertir el pan en su Cuerpo y el vino en su Sangre, lo cual es el sello de su alianza con nosotros.
ResponderEliminarOscar Noé Meléndez Miranda
San Juan Damasceno
ResponderEliminarEl sacerdote consagra el pan y el vino en el cuerpo y la sangre de Cristo, no por sus palabras, sino por las mismas palabras de Cristo verbo encarnado. De ahí que el sacerdote no puede darse el lujo de cambiar el texto de la plegaria Eucarística, sean las razones que sean. La sagrada comunión si bien se recibe para conveniencia propia, puede aprovechar al que la recibe de manera distinta, dependiendo de la dignidad con la que la reciba o de la indignidad y falta de fe con que se pueda recibir, pues para quien la recibe dignamente, alcanza el perdón de los pecados, la vida eterna y la defensa del alma y del cuerpo, mas para quien la recibe indignamente y sin fe, comete sacrilegio y le es no para bien, sino motivo de castigo y suplicio.
Mateo López Rodríguez
El bautizado tratara de vivir en coherencia, pues ha renacido del agua y del Espirítu Jn 3,5. Debe además ardientemente tener deseo de recibir la Eucaristía que es el Pan unido a la divinidad...
ResponderEliminarNéstor Ricardo Mariscal Álvarez. min.
San Juan Damasceno nos explica que la Eucaristía es el Pan de Vida, el mismo Cristo, quien a su ves la ha isntituído y que en virtud de sus Palabras se realiza tan magnífico prodigio, y que Él mismo une su divinidad a el Pan y el Vino, pasando éstas especies de su naturaleza propia a lo Sobrenatural de la cual nos hace consortes al unirnos a todos los fieles a su Cuerpo mediante la comunión, formando así un sólo cuerpo con Él; por ello hemos de recibirlo, los fieles, con dignidad y fe, para que nos aproveche para la vida eterna, de lo contrario nos alcanza la condena.
ResponderEliminarSan Juan Damasceno
ResponderEliminarLa Eucaristía es para el hombre la vida que nos libra de la muerte, puesto que es la que da vida a todo hombre y el alimento que nos purifica y lava de nuestros pecados. Por ello debemos de poner todo nuestro empeño para unirnos a Cristo, por medio de su Cuerpo y de su Sangre.
Sergio Carbajal Nuño
SAN JUAN DAMASCENO
ResponderEliminarDoctrina Eucarística.
La Eucaristía es el testamento nuevo para quienes creen en Jesucristo, la Eucaristía alcanza el perdón de los pecados, la vida eterna y la defensa del alma y del cuerpo a los que la reciben dignamente, también nos enseña que la Eucaristía nos participa de la divinidad de Jesucristo y nos une a su cuerpo,
ABRAHAM MERCADO CASTRO.
San Juan Damasceno presenta el poder de Dios en la creación pues si por su palabra ha creado todo y por su palabra se hizo carne. No dudemos de Él porque el ha dicho con la misma palabra creadora este es mi cuerpo y esta es mi sangre, es Cristo quien lo ha dicho y lo que dice se hace realidad.
ResponderEliminaratt. Fernando Aguilera González
El último padre de la Iglesia de oriente nos dice que la Eucaristía es el Testamento nuevo para todos nosotros que creemos en él y así como por el Verbo todo fue creado, por su Palabra el pan se convierte en su carne y el vino en su sangre. Al recibirlo alcanzamos el perdón de nuestros pecado y la protección de nuestro Señor si lo recibimos dignamente y nos une en un sólo cuerpo que es el de Cristo. Los ángeles aún cuando ven a Dios cara a cara no lo pueden recibir como nosotros. Qué grande privilegio! Muchas gracias paisano!!! Dios lo bendiga.
ResponderEliminarSan Juan Damasceno: es el último padre de la iglesia de Oriente, defiende la ortodoxia cristiana contra la herejía iconoclasta culto a las imágenes, la Eucaristía es el testamento nuevo para los que creen en Jesucristo, y es un autentico alimento su cuerpo y su sangre, por eso se hizo el Verbo que hombre para comunicar la vida divina. Evaristo Gabriel Flores Ochoa
ResponderEliminarDoctrina Eucarística del Santo Padre JUAN DAMASCENO
ResponderEliminar[Comentario: David Gutiérrez Murillo, 2° Teol.]
Considerado como el último Padre de la Iglesia en Oriente.
En Sobre la fe ortodoxa, nos enseña que Jesucristo estableció un testamento nuevo para sus santos discípulos y apóstoles, y por medio de ellos para todos los que creen en Él: y es nada más y nada menos que el mismo Pan de Vida.
Nos recuerda que si todo fue creado mediante el Verbo, ¿no podrá ese Verbo hacerse Cuerpo y Sangre para nosotros?
Enseguida algo que los duros de corazón no pueden admitir: la simplicidad de Dios. Dios toma lo ordinario para comunicarnos su vida divina: ya que los hombres suelen comer pan y beber vino, unió a ellos su divinidad, e hizo a estas cosas su cuerpo y su sangre para que por medio de las cosas ordinarias y naturales lleguemos a las que están sobre la naturaleza.
La Eucaristía nos alcanza el perdón de los pecados y nos une íntimamente a Cristo [como el fuego y la braza] haciéndonos partícipes de su divinidad, cosa de la que ni los mismos ángeles pueden participar. [Esto me acaba de estremecer… ¡Dios mío!]
Considera ala Eucaristía como el testamento de los que cren en Cristo, pues si el que creo todo con su Palabra ¿no podria hacer del pan su Cuerpo y del agua y el vino su Sangre? Él emplea algo ordinario(pan y vino) porque conoce muy bien la debilidad humana, sabiendo que los hombres usan el agua para lavarse y el aceite para ungirse, unio aal agua y al aceite la gracia del Espíritu haciendo con ello un baño de regeneración.
ResponderEliminarQuien recibe dignamente y con fe la Eucaristía le aprovecha para el perdón de los pecados, para la vida eterna y para defensa del alma, de lo contrario para castigo y suplicio.
La Eucaristía es la brasa unida al fuego del amor divinoque quema el pecado, ilumina nuestro corazón; ni los ángeles se unen al amor divino como lo hacen los hombres. JUAN MANUEL ÁLVAREZ MAYORGA
San Juan Damasceno: Hermosa su doctrina del Verbo por el cual todo se hizo y que por voluntad propia se hizo hombre. La fuerza de esa Palabra hace al Pan y al vino su Cuerpo y Sangre. La pedagogía divina hace que de las cosas de la naturaleza se nos transmitan gracias inefables (agua y aceite en el bautismo, pan y vino en la Eucaristía); así es Dios, no cabe duda: se empequeñece y se hace ordinario para hacernos grandes y obrar lo extraordinario en nosotros. Concientiza en su doctrina de recibirlo bien para recibir el torrente de gracias (y no la propia condena); a veces nos podemos arrutinar y no discernir lo que comemos, creo que es un gran peligro para los que tenemos la dicha de recibirle diario si no estamos atentos.
ResponderEliminarJosé Antonio Larios Suárez.
San Juan Damasceno
ResponderEliminarLa Eucaristía es el signo visible de Cristo entre nosotros de ahí que Cristo está vivo si comprendiéramos esto los cristianos no buscarían ningún otro lugar donde encontrar la felicidad. Pues la Eucaristía es el camino para la vida eterna donde, el hombre se encontrara con Dios y disfrutara de su presencia.
Jose Guadalupe Jimenez Nuñez.
San Juan Damasceno
ResponderEliminarEl sacramento de la Eucaristía es el alimento verdadero del los cristianos y el medio por el cual, Cristo ofrece su vida divina al hombre; no obstante, debemos estar alertas a no tomar este alimento en conciencia de pecado grave, pues en vez de alimentarnos, no afectaría (nos condena, es tan complaciente saber que el hombre, como lo afirma san Juan Damasceno,disfruta de esta unión divina con Cristo a través de la Eucaristía, inclusive sobre los ángeles.
Ernesto Martín Valdez Zambrano
Juan nos dice que si por la Palabra de Dios todo lo creado se hizo incluso el hombre, también por la Palabra se hace el pan en cuerpo y el vino en sangre de Cristo; los que reciben de manera digna la Eucaristía les perdona los pecados para la vida eterna; por medio de la Eucaristía nos unimos todos por participar de un mismo pan, así formamos un solo cuerpo de Cristo.
ResponderEliminarIsaac Esaú Guzmán Torres
El mayor testamento que Cristo nos dejó tanto a los apóstoles y a nosotros es la Eucaristía, nos dice el damasceno, pues los ángeles no pueden participar de ella. Nos muestra que si Dios es capaz de la creación y que el Verbo se hiciera hombre, con mayor razón el dar su cuerpo en la Eucaristía. Es por cosas cercanas a nosotros Dios nos comunica sus gracias sobrenaturales, por el pan y el vino. La Eucaristía nos perdona los pecados, nos da la vida eterna si lo comulgamos dignamente, si no nos trae castigo y suplicio, por lo cual debemos pedir a Dios que nos queme cual braza viva para que nos transforme. La Eucaristía nos une a Dios y entre nosotros, nos enseña este santo padre. FRANCISCO JAVIER CERVANTES RAMÍREZ
ResponderEliminarEste último Padre de la Iglesia de Oriente es toda una fuente de conocimiento y expone de manera clara la doctrina ortodoxa. Nacemos por el bautismo; y nuestro alimento es la Eucaristía. En la encarnación, la Palabra de Dios se hizo hombre, ahora, el mismo verbo se hace alimento de los hombres. De esta forma Dios emplea lo ordinario para comunicar su vida divina, el perdón de los pecados, la vida eterna, la defensa del alma y del cuerpo a los que reciben la Eucaristía. Es un privilegio exclusivo para los humanos la Eucaristía, ya que ni los ángeles pueden comerlo.
ResponderEliminarAlmanza Rodríguez Víctor Manuel
El último Padre de la Iglesia de Oriente y de la gran época patrística nos enseña como el hombre es privilegiado para unirse a la naturaleza divina al participar de la santa Eucaristía, que es algo que ni los ángeles, que son seres perfectos pueden hacer. Los hombres recibimos el Cuerpo de Cristo y esto nos une hipostáticamente a Él, y por eso no nos podremos nunca separar de Cristo, ojala este misterio nos ayude para acercarnos más a la mesa santa de la Eucaristía
ResponderEliminarEl nacimiento se nos ha dado por el bautismo, y el manjar es el mismo pan de vida, nuestro Señor Jesucristo que bajó del cielo. Estando nosotros para recibir la muerte, Él estableció un nuevo testamento para sus discípulos y para quienes todos los que creen en Él por medio de ellos. Afirma que, ni los mismos ángeles se unen a la naturaleza divina como lo hacen los hombres por la participación eucarística. ARMANDO GONZÁLEZ
ResponderEliminarSan Juan Damasceno.
ResponderEliminarSi comprendiésemos muchos fieles que la presencia viva entre nosotros, de Cristo se encuentra en la Eucaristía. Muchos jóvenes, niños, adultos, ancianos, pronto contemplarían la irradiación que sale de Él, la felicidad que nos brinda El, la oración que nos hace jóvenes. No todos los fieles son así, ignorantes, o que prescinden de este sacramento, sino, que si hay gran parte que si comprenden esta presencia viva, verdadera, de Cristo. Es el hombre de hoy, es el niño de hoy, es el anciano de hoy, por eso ni los Ángeles se unen a la naturaleza divina como lo hacen los hombres de hoy, por la participación en el banquete tan sagrado, que es la Eucaristía.
Con Aprecio y estima: Rivas Mariscal Sebastián.
Muy cierto lo que dice san Juan Damasceno al concluir que si Dios por su Palabra hizo el cielo, la tierra, el agua, el fuego y el aire e incluso al mismo hombre y por su voluntad se hizo hombre tomando carne de la sangre de la purisima Virgen María sin intervención del varón ¿acaso no podrá hacer al pan cuerpo suyo y al vino y al agua su sangre? Para Dios nada es imposible, el hombre es el que se cómplica la vida y se ahoga en un vaso de agua.
ResponderEliminarSan Juan Damasceno
ResponderEliminarLos hombres son las únicas creaturas que gozan de alimentarse del cuerpo de Cristo verdadero Dios y hombre, es el poder de la Palabra Creadora la que hace posible que el par alimento ordinario del hombre se convierta en la carne del hijo de Dios. La celebración de la Eucaristía es la celebración de alianza de amor pactada con Dios por Cristo y en Cristo. Fabián Estrada Campos.
Dios con la naturaleza humana emplea las cosas ordinarias para poder comunicarse con el hombre.
ResponderEliminarLa eucaristía alcanza el perdón de los pecados.
La comunión puede ser para bien o para mal, antes de irnos a formar para comulgar, revisemos como esta nuestra alma, si de verdad esta limpia y preparada para recibir el cuerpo de Cristo.
San Juan Damasceno:
ResponderEliminarEl damasceno arguye la posibilidad dela transubstanciación a partir del poder de Dios creador. En la misma línea de la creación que conduce a la fe, añade que es por medios ordinarios que llegamos a gustar realidades sobrenaturales.
A través de la imagen del carbón encendido nos muestra cómo la eucaristía sirve para que nuestro carbón arda en amor a Dios.
La Eucaristía es el signo visible de Cristo entre nosotros de ahí que Cristo está vivo si comprendiéramos esto los cristianos no buscaríamos ningún otro lugar donde encontrar la felicidad. Pues la Eucaristía es el camino para la vida eterna donde, el hombre se encontrara con Dios y disfrutara de su presencia. Esta es la clave para vivir en el amor y como ejemplo tenemos la comunidad de hechos de los apóstoles en donde todos Vivian en la caridad perfecta en Jesucristo.
ResponderEliminarOSCAR HUMBERTO RODRIGUEZ MEDINA ( T R I K I S )
Comentario a la doctrina eucarística.
ResponderEliminarGracias a la Palabra de Dios hecha carne, las especies eucarísticas sufren la transubstanciación, de lo ordinario y cercano al hombre Dios se acerca a él para comunicarle su gracia y hacerle partícipe de su vida divina por medio de la remisión de sus pecados, gracias a la Eucaristía nos unimos a la naturaleza divina, al cuerpo místico de Cristo
LUIS ALFONSO GARCÍA FUENTES
es la eucaristia el testamento nuevo para los que creen en Cristo y asi como Dios hizo todas las cosas tambien él mismo tranforma el pan y el vino en su cuerpo y en su sangre y por ser de Dios este sacramento tambien perdona los pecados del hombre
ResponderEliminarOscar Ivan Rivas Perez
COMENTARIO DE SAN JUAN DAMASCENO
ResponderEliminarLa mayoría de los escritos eucarísticos que se tienen son de su Sobre la fe ortodoxa, específicamente, en la parte que es sobre los santos e inmaculados misterios del Señor; por lo cual, es muy interesante cuando saber que a estos misterios, específicamente, sobre los misterios de la Eucaristía los considera, por supuesto, santos e inmaculados. A la Eucaristía, dirá, que hay que considerar que se nos da para que lo recibamos “santos e inmaculados” que evitemos recibirlo indignamente, para que no recibamos castigo. Y a modo general, considera que es un sacramento por el cual Dios ha dado a los hombres, no a los Ángeles. Y nosotros, hemos de considerar su sentido sobrenatural. Dios se da como testamento nuevo y poderoso, que sólo por la fe se recibe.
Omar Gerard Leyva Cárdenas.
Doctrina eucarística
ResponderEliminarComentarios:
Sobre la fe ortodoxa y sermones
Con facilidad perdemos la conciencia que por ser bautizados debemos estar más ligados con Dios a través de la comunión eucarística. Dios es tan capaz, el más grande que lo que dice se hace y por eso lo tenemos en la hostia consagrada. Y si dice que nos va a perdonar los pecados lo va a cumplir. Es el hombre la criatura preferida la que tiene la dicha de hacerlo presente y de comerlo.
Higinio Juárez Rendón
Afirma en su doctrina Eucarística que, así como el Verbo se hizo carne para poner su morada entre nosotros, también tiene el poder para hacer que se convierta el pan en el Cuerpo y el vino en Sangre. Dios emplea las cosas ordinarias y familiares para comunicarle al hombre su vida divina. emplea pan y vino porque conoce Dios la debilidad humana.
ResponderEliminarCOMENTARIO DE SAN JUAN DAMASCENO
ResponderEliminarEn su doctrina Eucarística nos comunica que quienes participamos de el Pan y el Vino participamos de la vida divina de Jesús. Él nos hace participe en su bautismo.Omar Gerard Leyva Cárdenas.
Nuestro santo nos dice que, de la misma forma como nacemos por medio del agua y del espíritu, así también nuestro Señor Jesucristo es un manjar para nosotros, puesto que es el mismo pan de vida bajado del cielo. Menciona que si la Palabra de Dios hizo todo lo que existe, el cielo, la tierra, el fuego, el mismo hombre, etc., e incluso el Verbo se hizo carne, también tiene poder esta misma Palabra para poder convertir el pan en su cuerpo y el vino en sangre. Dios, continúa el santo, se vale de cosas ordinarias como el pan y el vino puesto que los hombres suelen comer pan y beber agua y vino, “unió a ellos su divinidad, e hizo a estas cosas su cuerpo y su sangre para que por medio de las cosas ordinarias y naturales lleguemos a las que están sobre la naturaleza.” Finaliza el texto recordando lo que el santo menciona en su obra Sermones sobre las imágenes (sermón 3, 26), que ni siquiera los ángeles han sido creados para participar de la naturaleza divina como lo han sido los hombres, pues “son hechos consortes de la naturaleza divina, a saber, todos aquellos que reciben el santo cuerpo de Cristo y beben su sangre”.
ResponderEliminarEstos autores, santos y hombres de Dios, nos han dejado un tesoro increíble a través de sus escritos que nos debería de llevar a sentirnos orgullosos de todo el camino que ha realizado Dios en su Iglesia a través de los siglos y de personas fieles a su gracia y, al mismo tiempo, agradecer su paciencia para con nosotros pues sabe que somos lentos para captar lo que él nos quiere transmitir a través de estas líneas.
Eduardo Camacho Nieves